Fernando de Haro: "Bolaños tiene competencias para tener a raya al poder judicial"

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Este fin de semana quise asomarme en una de las plataformas de streaming al que dicen que es el thriller del año. Cometí un error. Solo quería echar un vistazo y el vistazo duró los 124 minutos que dura la película.

No es un thriller con muchos efectos especiales, pero te engancha desde el primer momento. Toda la acción transcurre en una noche. La noche antes de jubilarse, del teniente de policía Franco Amore al que le llaman para investigar en la escena del crimen donde mataron a su mejor amigo y compañero de toda la vida, Dino.

Franco es un policía tranquilo, familiar. Lo consideran un blando. Pero mira por donde el blando, el tranquilo, acaba siendo el que sabe descubrir una traición, varias muertes que no se tenían que haber producido. Franco, el policía tranquilo, tiene como armas la observación, la fidelidad a sí mismo y el amor por los suyos. No, la fuerza de Franco no es que sea intachable, de hecho no lo es, su fuerza es que está más pendiente de lo que está pasando que de lo que tiene en la cabeza.

Ya es la próxima semana. El presidente Sánchez lo ha reconocido, cambios pocos. Un gobierno es como un retrato de su presidente, de lo que el presidente considera prioritario. Y la tarea que Sánchez considera prioritaria para su Gobierno es el mismo Gobierno, seguir en el Gobierno. Eso explica las decisiones que ha tomado.

Núcleo duro del Gobierno. Novedades pocas. Calviño, Ribera y Yolanda Díaz sigue siendo vicepresidentes. Bolaño reforzado, además de ministro de presidencia, ministro de justicia. Un ministro para el Gobierno y el mismo ministro para los jueces. Toda una declaración de intenciones. Bolaños con competencias para tener a raya al poder judicial.

En este núcleo duro entra María Jesús Montero, ministra de Hacienda, más poderes para llegar a acuerdos sobre los dineros que piden los independentistas. Hay que cuadrar los presupuestos. No es solo amnistía, es el dinerito.

Segundo círculo. Sorpresa. Marlaska sigue ahí, de ministro del Interior. El ministro que, según los sindicatos de la Policía y las asociaciones de la Guardia Civil, lo consideran como el "peor ministro". El coronel Sánchez Corbí fue destituido por una "pérdida de confianza".

Después le llegó el turno a Diego Pérez de los Cobos.

De los Cobos trasladó el asunto a los tribunales. Tras un largo recorrido judicial, el Supremo le dio la razón. Mintió en el asalto a la valla de Melilla.

Tercer círculo, los ministros que tienen poco que hacer. Y ahí llama la atención el nombramiento de Óscar Puente en transporte. Premio por haber asegurado el debate de investidura que Aznar, el PP instigó los atentados del 11M. Y luego, fuera del tercer círculo, están los ministros de Sumar.