Fernando de Haro: "Si la economía sigue sufriendo una inflación alta nuestro bolsillo estará muy amenazado"

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Muy buenas tardes a la gente, gente. Los cerdos son omnívoros. Comen de todo. Cuando Camilo José Cela creó un personaje al que los cerdos le habían comido las orejas, estaba novelando pero con apoyo en la realidad. María tiene una granja de cerdos en Talavera de la Reina y en las dos naves dedicadas a la explotación caben 2.500 animales. Algunos de esos animales, muchos, por la huelga de transportistas, no han comido desde el lunes por la tarde.

Mónica Villalaín, del equipo de 'La Tarde', ha hablado con María. No tiene para darle de comer a los cerdos y los cerdos se están comiendo unos a otros. María ya ha perdido a seis.

Por fin el Gobierno está sentado con los transportistas desde las 11:30h de la mañana. Tienen el encargo de no levantarse hasta que no haya acuerdo pero hay un problema para que, efectivamente, llegue ese acuerdo antes de que acabe el día. El Gobierno sigue sin querer sentarse con la organización de autónomos que empezó la huelga. La ministra Montero lo ha dejado claro.

Vamos a ver, ministra. ¿Por qué no es democrático unirse con los convocantes de la huelga? Sánchez se ha enterado de que España estaba sufriendo una huelga general. Ha dado el encargo de que haya un acuerdo. El Gobierno no está dispuesto a bajar los impuestos del combustible pero sí aceptar una solución a la francesa: dar una ayuda a los transportistas profesionales. En realidad, la ayuda que está ofreciendo Sánchez a los transportistas ya existe. Es el gasóleo profesional, y consiste en que trimestralmente el Gobierno devuelve a los transportistas cuatro céntimos y medio del impuesto de hidrocarburos. Se trata de subir esa cifra y piden los transportistas que sea en el surtidor donde se vea el dinero. Macron ha incrementado la ayuda a 15 céntimos por litro. Ya podía Sánchez haberse dado cuenta antes de que esta podría ser la solución y nos habríamos ahorrado 130 millones que son los que ha perdido la alimentación. Vamos a ver si hay acuerdo.

El Gobierno quiere también que, de los 500 millones que ofreció, las petroleras pongan la mitad. El problema de las petroleras es importante, sobre todo de las empresas de distribución de combustible en España. Las grandes cadenas controlan demasiadas gasolineras y no hay suficiente competencia. Pero claro, eso no se soluciona en un día. El problema de los precios de la energía nos va a acompañar durante mucho tiempo y si la economía española sigue sufriendo una inflación alta nuestro bolsillo estará muy amenazado. Hace falta un pacto de rentas y político como llevamos diciendo desde hace tiempo. Sánchez está más solo que nunca y parece que no tiene cintura para afrontar una situación así. Hay que sentarse a pensar, definir prioridades, buscar apoyos, construir consensos y tomar decisiones.

Sánchez quería que el Consejo de Europa aprobara las medidas que redujeran el impacto en los precios del shock energético. Héctor Gómez, el portavoz del PSOE, ya nos está preparando para un fracaso. Sánchez ha renunciado a un sistema que desvincule el precio del gas al precio de la electricidad. Vamos a ver en qué queda el Consejo Europeo pero esta crisis puede solucionarse sentándose a pensar, buscando apoyos y consensos.