De Haro: "En Colón había muchas personas a las que el Gobierno ha descalificado"

"Sin entrar en la guerra de cifras, es evidente que la concentración reunió a más personas que cualquier partido de fútbol"

Fernando De Haro

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Alfonso Cuarón fue ayer el gran ganador con la película Roma de los premios Bafta, los galardones del cine británico que suelen anticipar las tendencias de los Oscars. Cuarón se llevó cuatro baftas. Es perfectamente comprensible que haya mucha gente a la que Roma no los guste, es un cine de planos lentos, contemplativos. Utiliza un lenguaje cada vez menos frecuente. Pero la película cuenta una historia llena de humanidad de dos mujeres solas, abandonadas por dos canallas, que sin aspavientos, afirman la vida. Roma tiene la belleza de lo cotidiano, de esa afirmación de la vida que solo puede ser femenina.

La que no tiene ninguna belleza es la manera en la que el Gobierno, y en concreto, Sánchez ha reaccionado a la manifestación que congregó ayer a decenas de miles de personas en la plaza de Colón. Desde minutos después de que se cerrase la concentración el Gobierno intentó asegurar que había pinchado. Y hoy ha seguido. El ministro de Fomento, mano derecha de Sánchez, ha asegurado esta mañana que había menos gente que en algunos partidos de fútbol.

Sin entrar en la guerra de cifras, es evidente que la concentración reunió a más personas que cualquier partido de fútbol. Es evidente que la concentración no fue como las históricas manifestaciones que se produjeron con motivo de algunos atentados. Una manifestación no se improvisa y es un último recurso. Pero había cientos de miles de personas a los que el Gobierno por boca de la inefable Carmen Calvo, ha descalificado, asegurando que la concentración estaba convocada por una derecha que no acepta la Constitución.

Carmen Calvo se ha convertido en una amenaza para la inflación, cada vez que habla sube el pan. Airear el fantasma de una derecha anticonstitucional después de que el PSOE haya mantenido pactos con Ciudadanos y después de que el PSOE apoyara al PP en la aplicación del 155 es una manera poco elegante de hacer subir el precio de las hogazas y de las barras. Para completar las reacciones Pedro Sánchez en Twitter se ha querido presentar como el presidente que está en el centro, en una equidistancia supuestamente virtuosa entre los independentistas y los que se manifestaron en Colón. 

En Twitter, porque el presidente del Gobierno no comparece en ruedas de prensa ni tampoco en el parlamento, ha asegurado que "ni unos ni otros han entendido lo que supuso la moción de censura: la puesta en pie de una España moderada. Sánchez dice que la moción de censura apoyada por Bildu, por ERC, por Podemos, por el partido de Puigdemont puso en pie una España moderada. Esas cosas no las diría Sánchez ni en el Congreso ni en una rueda de prensa porque se le caería la cara de vergüeneza, pero Twitter lo aguanta todo.