Faltan ocho horas para el apagón. 8 horas para que entre en vigor el decreto del gobierno sobre ahorro energético que obliga a apagar escaparates y edificios públicos a las 10 de la noche y a regular la temperatura en la administración, empresas, comercio y hostelería.
Si mañana a esta hora entra en tu tienda un inspector y se encuentra con el termostato a 24 grados en lugar de a 27 podría multarte. Digo podría porque en este momento nadie sabe quien se va a encargar de vigilar los termostatos ni que Comunidades Autónomas están dispuestas a poner esas multas o cuales a hacer la vista gorda.
Implantar una medida como ésta en mitad de agosto, con más de media España de vacaciones y sin consenso entre comunidades solo puede llevar al caos.
Mañana estaremos en comercios, bares, restaurantes a ver como se está aplicando la medida pero eso será mañana porque hoy lo que muchos hemos comentado con pena desde la hora del café es que se nos ha muerto Sandy
Ha muerto Olivia Newton John a los 73 años. Llevaba 30 conviviendo con un cáncer de mama que finalmente ha podido más que ella.
Nunca fue ni la mejor ni más prolífica actriz, ni quizá la mejor ni más famosa cantante pero nos regaló un personaje que ya parte de la vida de muchas generaciones gracias a la película Grease.
Sandy es el icono de la mujer que se transforma, como diría Rosalía.
Empieza Grease como una jovencita buena e inocente a la que le ha roto el corazón su gran amor de verano y termina la película llevando las riendas y enamorando a todo el mundo enfundada en su mono de latex negro, una de las prendas más icónicas de la historia del cine.
Muchas crecimos cantando y bailando las coreografías de Grease y lo curioso del fenómeno es que es de las pocas películas que han trascendido a varias generaciones.
Cualquier adolescente de hoy en día sabe los movimientos de la coreografía de John Travolta en el Garaje al ritmo de “Grease Lighting”.
Muchos alucinan de que muchos sintamos pena por la muerte de un ídolo, pero con él o ella muere una parte de nuestra adolescencia y refleja sin escapatoria el implacable paso del tiempo.
Se muere un mito y se muere parte de tu juventud. Larga vida a Sandy, larga vida a Grease.