"Este tipo de arengas y alusiones a la lealtad son las que se recuerdan cuando empieza a haber dudas sobre un liderazgo"
La directora de 'La Tarde', que hace hoy el programa desde Tenerife, analiza las consecuencias del Congreso del PSOE en Sevilla este fin de semana
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Bienvenido a La Tarde COPE, que hoy estamos haciendo desde Tenerife, donde estamos celebrando los 25 años de la Declaración de San Cristóbal de La Laguna como Patrimonio de la Humanidad.
Y así se puede estar viendo a sí mismo Pedro Sánchez, como un patrimonio, pero del PSOE. Algo que debe ser mimado y protegido contra viento y marea. Esa línea ha seguido precisamente el Congreso Federal Socialista que ha tenido lugar en Sevilla.
Toda la escenografía fue diseñada para reforzar la imagen de Pedro Sánchez y por extensión, la de su mujer Begoña Gómez y los focos puestos a pleno rendimiento para que cualquier atisbo de auto crítica interna quedara deslumbrado.
Pero lo cierto es que el estruendo de los aplausos no solo tapa las criticas internas, sino también los susurros entre aquellos que no acaban de ver claro el futuro de su partido y que ahora por ejemplo, se enfrentan a graves crisis territoriales como las de Aragón, Andalucía, Castilla y León o Madrid tras la dimisión obligada de Juan Lobato.
Lo malo que tienen esos espectáculos de masas entregadas es que una vez que se apagan las luces hay que volver a la realidad. Y en esa realidad hoy se sigue investigando también a la mujer del presidente, se sigue investigando a su hermano y se sigue investigando el 'caso Koldo', o ya 'caso Ábalos', quien por cierto está citado a declarar voluntariamente en el Supremo el próximo 12 de diciembre.
Frente a todo esto, el PSOE actual se ha conjurado para cerrar filas, luego construir un muro, después cavar trincheras, elevar una fortaleza y al final meterse dentro de un búnker político que permita la supervivencia de Pedro Sánchez pase lo que pase a su alrededor.
Zapatero lo dejó bien claro: la lealtad es la regla fundamental del PSOE. Y lo que me llama la atención es que este tipo de arengas y alusiones a la lealtad son las que se recuerdan, precisamente, cuando empieza a haber dudas sobre un liderazgo.