Cómo la etiqueta de un bazar y la colaboración en Twitter ayudaron a resolver el asesinato de Freddy Palacio

En diciembre de 2021 la Policía publicó este enigmático tuit: ¿Sabes de qué comercio de la Comunidad puede ser esta etiqueta? Esta información podría ser clave en la investigación de un delito grave. Si conoces de algún comercio que la use, cuéntanoslo por mail. Se acompañaba de una dirección de correo y una foto: una etiqueta que ponía SUPER BAZAR EURO 1.80. No soltaron prenda sobre qué se investigaba. Ahora se ha sabido que el delito grave era el asesinato de Freddy Palacio, un hombre al que mataron en su piso de Vallecas, en Madrid, el 27 de noviembre, unos días antes.

Los autores lo torturaron durante una hora, le clavaron un cuchillo y huyeron tras llevarse su caja fuerte. La Policía ha resuelto de forma brillante este crimen. Ha detenido a nueve personas que están en prisión, entre ellas la prima de la víctima y su marido que fueron quienes lo idearon. En este caso la colaboración ciudadana fue esencial.

Hoy Cruz Morcillo y Pablo Muñoz han comentado en 'La Tarde' las investigaciones que se desarrollaron en este caso. ¿Por qué era tan importante encontrar la procedencia de la etiqueta? "El crimen era raro, la cadena del piso estaba echada por dentro con la víctima muerta", apunta Cruz. A posteriori, averiguaron en la autopsia que en con el último aliento y moribundo, cerró él porque pensaba que lo iban a seguir torturando.

"En la escena del crimen se encontraron dos etiquetas, una de ellas la mencionada". La primera estaba pegada en la cinta aislante que amordazaba a la víctima y ponía "1,35€". La otra estaba en una caja de diez guantes de látex que alguien había tirado a la basura", subraya. En esta quedaron seis, por lo que dedujeron que los asaltantes fueron dos. Y en el cartón de la caja había otra pegatina con la leyenda: "Super bazar, 1,80€". Por lo tanto, Los investigadores necesitaban localizar la tienda donde se habían vendido los guantes, las bridas y la cinta aislante para resolver el crimen y por eso se pidió ayuda a través de una red social. Con la ayuda de centenares de personas anónimas de esa red social, se localizó el bazar en Parla, tras peinar decenas de locales antes. La etiqueta concreta tenía un fallo, una especie de raya por un defecto de la máquina de impresión.

Sin embargo, con conocer el establecimiento de venta de los guantes, no fue suficiente. Lo que fue determinante en la investigación fue la ayuda ciudadana.

Por otro lado, las investigaciones de la policía, también fueron determinantes, ya que cuando tomaron declaración al entorno de la víctima, les llamó la atención que su prima María Alejandra mintiera. "Primero dijo que no sabía que había una caja fuerte y luego cuando le dijeron que su madre (tía) de la víctima había declarado que supo de esa caja por su hija, sí lo reconoció", afirma Pablo Muñoz. Los agentes del Grupo V de Madrid se quedaron con eso y pusieron la lupa en ella y su marido. "Ella había trabajado en la inmobiliaria de su primo y además tanto ella como su marido habían sido detenidos junto a la víctima por blanqueo y asociación ilícita, por lo que ya estaban relacionados con la delincuencia.

"El problema es que tanto Alejandra (prima de la víctima) como Luis Edward, (su marido) tenían coartada el sábado 27 de noviembre cuando se cometió el crimen", señala Cruz Morcillo. Él estaba repartiendo con una furgoneta y ella visitando Madrid con su madre y sus tías. Sin embargo, la Policía les acusa de inductores y los detuvieron porque solo cuatro personas conocían la existencia de la caja fuerte.

¿Quiénes fueron los autores entonces? Los implicados en el caso fueron 9 personas, los cuales están todos en prisión y pertenecen a una banda. A la hora de desarrollar el crimen organizaron el plan, de tal forma que a la casa entraron dos hombres, los que torturaron y robaron. "Eran dos dominicanos que cuentan con numerosos antecedentes. Además, los acompañaba una mujer, una extrabajadora de Freddy con la que acabó mal (encargada de hacer que él abriera la puerta). Otro delincuente fue el encargado de llevarlos en coche a la casa y luego los recogió con la caja fuerte", afirma Pablo.