Controlar el avance de la DMAE para evitar la pérdida de visión es posible

La degeneración macular asociada a la edad, también conocida como DMAE, es una enfermedad visual que afecta a la parte central de la retina y que supone la principal causa de ceguera en mayores de 50 años. En España, existan más de 800.000 personas afectadas.

Existen dos tipos de DMAE, la DMAE seca, en la que la retina empeora de forma gradual, y la húmeda, que es la que produce un empeoramiento más rápido y es responsable del 90% de las pérdidas de visión grave. La DMAE húmeda o neovascular provoca la aparición de nuevos vasos sanguíneos – neovascularizaciones – que causan una acumulación de fluido debajo de la retina.

Afortunadamente, hoy en día es posible tratarla eficazmente y detener su progresión mediante tratamientos que controlan esta acumulación de fluido. La clave es detectarla lo antes posible para evitar que sus daños en la visión sean irreversibles y mantener un tratamiento continuado.

La doctora Isora Follana, oftalmóloga especialista en retina en el Hospital Universitario Marqués de Valdecilla (HUMV), participará el próximo jueves 10 de junio en el programa ‘La Tarde’ y abordará las claves para identificar la DMAE de forma temprana y administrar un tratamiento eficaz para detener la pérdida de visión.

En este sentido, la campaña de concienciación puesta en marcha por Novartis en colaboración con la Sociedad Española de Retina y Vítreo, la Sociedad Española de Oftalmología la asociación Acción Visión España, la Confederación Española de Organizaciones de Mayores (CEOMA) y la Unión Democrática de Pensionistas y Jubilados de España (UDP), #MuchoPorVer (link web muchoporver.com) tiene el objetivo de ofrecer información sobre la enfermedad, además de fomentar la importancia del diagnóstico precoz y el tratamiento temprano.

A través de la página web, #MuchoPorVer ofrece recursos y herramientas de apoyo para cuidar la salud visual y acompañar a pacientes y familiares en la convivencia con la enfermedad, además de recomendaciones para identificar los signos de alerta y cuidar la salud ocular. Algo fundamental a partir de los 50 años.