El detalle en el helicóptero del accidente de Nueva York que debería de haber alertado y del que avisa un experto: "No hay margen"
Lo que debía ser un recuerdo inolvidable, terminó en una tragedia que ha conmocionado a dos continentes

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Lo que para muchos es una actividad casi obligatoria al visitar Nueva York —una panorámica aérea de la ciudad desde un helicóptero— ha terminado en tragedia. Una familia española ha perdido la vida tras estrellarse el helicóptero en el que sobrevolaban Manhattan. Se trata de Agustín Escobar y Merce Camprubí, ambos directivos de Siemens, junto a sus tres hijos de 11, 5 y 4 años. Los cinco habían llegado desde Barcelona a primera hora del día anterior y decidieron comenzar su estancia con una de las experiencias más populares entre turistas. Pero en pleno vuelo, la nave se precipitó al río Hudson. También fallece el piloto.
“Vienes aquí para visitar la ciudad y verla desde el cielo. Es un accidente tan desastroso”, lamenta el alcalde de Nueva York, Eric Adams, que confirma que se trata de una familia española. “Nuestro corazón está con los familiares y con la gente de España”, añade, asegurando que ya trabajan en coordinación con las agencias federales y el Consulado español para esclarecer lo ocurrido.
El aparato, un helicóptero operado por la empresa New York Helicopters, había despegado del helipuerto del centro de Manhattan en su sexto vuelo del día. Apenas 16 minutos después, sufrió un fallo catastrófico en pleno vuelo. Según las primeras informaciones, el helicóptero perdió partes esenciales como el rotor principal y la cola, lo que provocó su caída en picado y el posterior impacto contra las aguas del Hudson.

Agustín Escobar Cañadas, su esposa, Mercè Camprubí Montal, y sus tres hijos: la familia española fallecida en el accidente de helicóptero de Nueva York
¿Qué pudo haber fallado?
Las causas del accidente todavía están siendo investigadas, pero las hipótesis ya han comenzado a circular. Según Rubén Dapica, piloto y portavoz del Colegio Oficial de Pilotos de la Aviación Comercial, cualquier análisis en este momento es “completamente especulativo”.
“Es imposible saberlo con los datos que tenemos”, insistió, aunque quiso dejar claro que la hipótesis de que la aeronave se quedara sin combustible —como ha señalado el propio operador— no parece, a priori, estar relacionada con un fallo tan severo como la pérdida del rotor principal. “Hasta donde yo sé, eso no tiene relación alguna con el combustible.”
Dapica explicó, en La Tarde, que este tipo de fallo puede deberse a múltiples factores, desde errores de mantenimiento hasta defectos de diseño, operación o fabricación. “Ya ha habido precedentes de accidentes similares. En esas investigaciones se analizó absolutamente todo.”
Como prever una desintegración en vuelo
A veces sí, a veces no. Así de contundente fue Rubén al responder si es posible detectar a tiempo una falla en el rotor. “Puede manifestarse en forma de vibraciones o indicaciones anormales que den al piloto tiempo para reaccionar, pero en otras ocasiones ocurre de forma tan repentina que no hay margen de actuación.”
Tampoco el estado del tiempo parece haber sido un factor determinante. A pesar de que el día estaba nublado y frío, no había condiciones meteorológicas extremas. “A menos que hubiese aparato eléctrico, como rayos, que sí han causado incidentes similares en el pasado, no parece una de las líneas principales de investigación ahora mismo.”
Y aunque la posibilidad de un impacto con un ave también fue planteada, el portavoz subrayó que este tipo de accidentes son “muy infrecuentes” y de momento no hay nada que indique que esa fuera la causa.

El español Agustín Escobar Cañadas, directivo de Siemens, su esposa, Mercè Camprubí Montal, también directiva en esta empresa, y sus tres hijos, son cinco de las seis víctimas mortales del accidente de helicóptero ocurrido este jueves en aguas del río Hudson, en Nueva York
UNA ACTIVIDAD POPULAR, PERO NO EXENTA DE RIESGOS
Las visitas turísticas en helicóptero son una atracción muy demandada en Nueva York. Están reguladas de forma que solo pueden volar por los ríos, evitando zonas habitadas para minimizar riesgos en caso de accidente.
Sobre la seguridad del vuelo a baja altitud, Rubén matizó: “El vuelo bajo no es el más seguro para un helicóptero. Es preferible mantener cierta altura para tener margen de maniobra si ocurre una emergencia.”
Desde 1977, al menos 32 personas han fallecido en accidentes de helicóptero en Nueva York. Sin embargo, Rubén subraya que la aviación sigue siendo el medio de transporte más seguro. “Eso no es casualidad. Cada accidente es analizado minuciosamente para detectar brechas de seguridad y evitar que se repitan.”