"Eso es lo importante": El economista Trías de Bes señala dónde debes fijarte al contratar una cuenta nómina

¿Cómo elegimos una cuenta nómina que nos convenga? ¿Qué hay que tener en cuenta ante avalanchas de ofertas de regalos por parte de los bancos? El economista Fernando Trías de Bes señala en La Tarde este viernes dónde tenemos que fijarnos a la hora de firmar una nueva cuenta nómina con algún banco entidad financiera.

Pero, para ello, y sobre las cuentas con los bancos, el experto explica lo importante que resulta para las entidades que los clientes sean “principales”. “Vinculación parece una palabra normal pero en realidad es jerga financiera, una de las cosas que tratan los bancos es de tener lo que se llama “cliente vinculado”. Ellos saben perfectamente hasta qué punto es tu banco principal o secundaria”, explica a Pilar Cisneros. Por eso, ¿para cuántos somos bancos principal y para cuántos no lo somos? “La entidad financiero tiene como objetivo ser tu banco principal, esto es fundamental, porque si es el secundario les resulta muy difícil hacer negocio contigo”, comenta.

Qué es una cuenta nómina

Y antes de explicar en qué parte tenemos que fijarnos si vamos a contratar una nueva cuenta nómina hay que apuntar en qué consiste, definirla. “Para ser cliente principal la entidad tiene dos formas. La primera es a través de la hipoteca, porque aparte te dice que te va a dar mejores condiciones si domicilias la nóminas o te lo redondea a la baja si incluyes también seguros”, subraya Trías de Bes.

No obstante, matiza, cuando no hay hipoteca de por media el recurso principal del banco es la cuenta nómina. “El punto de partida para todo lo que va a venir a continuación es la nómina aquí, porque al final donde tienes la nómina es donde domicilias los recibos”. Así, subraya, a partir de ahí pueden hacer negocio con todo lo demás: tarjetas de crédito, de débito, recibos...

En qué fijarnos al firmar la cuenta nómina

Una vez hemos aclarado cómo se genera el dinero a través de las cuentas nóminas, Trías de Bes señala en qué debemos fijarnos. “Nos pueden ofrecer de todo, porque el abanico de posibilidades es enorme, partiendo de que hay una primera parte: el incentivo. El departamento de marketing piensa un señuelo, ya sea un televisor o un 5% TAE, pero luego hay que mirar porque lo mismo te lo hacen sobre unos miles de euros solo”, advierte. Y, de la misma forma, también pueden ofrecerte tarjetas gratis, regalos, 200 euros de entrada...

Pero, ¿dónde está el truco? “Atención al incentivo: está muy bien el regalo pero separa el incentivo puntual de la condición”, avisa. “Es muy difícil hacer una comparativa, requiere mucho tiempo, muchos cálculos o hipótesis, por eso separa lo que es al principio y solo una vez y, a partir de aquí, toma las condiciones generales, que son las de siempre: ¿tiene mantenimiento anual? ¿Y la tarjeta de crédito tiene cuota? ¿Tienen gasto las trasferencias? Eso es lo importante porque es lo que va a durar. Y luego los intereses, pero primero los gastos”, concluye el economista en La Tarde.