La inteligencia artificial avanza a pasos agigantados: ¿cuál es su límite?
El uso de la inteligencia artificial ha beneficiado al ser humano en el campo de la medicina mejorando la resolución de los TAC ayudando a realizar mejores diagnósticos
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Cuatro científicos expertos en Inteligencia Artificial, Geoffrey Hinton, Yann LeCun, Yoshua Bengio y Demis HAssabis; han sido galardonados por el Premio Princesa de Asturias de Investigación, Ciencia y Técnica 2022. Una muestra de que la inteligencia artificial vuelve a estar de actualidad.
Más si cabe, según el diario The New York Times publicó el despido de un Ingeniero de Google, Blake LeMoine, que había hecho público un informe en el que aseguraba que el Programa de Inteligencia Artificial en el que estaba trabajando era capaz de mostrar sentimientos. Según la empresa, ha sido suspendido de empleo y sueldo por vulnerar "la confidencialidad de la empresa". El personal despedido hizo pública una transcripción de una conversación con el Sistema de inteligencia artificial, llamado Modelo de Lenguaje para Aplicaciones de Diálogo (MDA).
Según se hizo público, mantuvo una conversación en el que la inteligencia artificial mostraba sentimientos que fueron descritos como "si estuviese cayendo en un futuro desconocido que conlleva un gran peligro". A su vez, en esa transcripción se considera la propia máquina como un ser humano más al considerar el uso del lenguaje como aquello que "les hacía diferentes". Para hablar del tema ha dado su opinión el divulgador científico, Jorge Alcalde. Para él, este gesto implica "muchísima inteligencia por parte de la inteligencia artificial", ya que si un aparato hace creer que es capaz de tener conciencia, "quizás la tiene".
Alcalde también ha descrito que las máquinas cuentan con una red neuronal que está compuesto por innumerables puntos que se llaman nodos, que son los que recogen las preguntas y respuestas que van aprendiendo. De tal manera que la inteligencia artificial aprende y se autogestiona. "Para que un ordenador aprenda, se debe hacer millones de preguntas, cambiar nodos" y así aprenderá a responder o, por ejemplo, determinar si una foto de una piel podría tener o no melanoma.
Su futuro es desconocido
Con relación al futuro, el divulgador lo considera desconocido, "ya que ha pasado por diferentes altos y bajos desde que empezara a hablarse de él en los 50 y 60, pasando por un gran valle en la que parecía que no iba a servir para nada". Pero ahora que ha recobrado importancia gracias a la computación. Algo que ha permitido hacer cosas "maravillosas", como aplicarse a la medicina, "por ejemplo, en una imagen médica realizada en un TAC mejorando la resolución de las imágenes que realizan, permitiendo diagnosticar mejor". Además, ha dado algún susto, ya que los niveles que empieza a conseguir parecidos a los que se exponen en las películas de ciencia ficción.
De hecho, acorde a lo que se ha podido observar con lo publicado en el New York Times el pasado 11 de junio, Google parece estar trabajando en generar conversación. Para ello genera sistemas en los que la máquina sea capaz de conversar con absoluta normalidad gracias a los millones de nodos con las preguntas que un ser humano puede realizar, y así contestar con absoluta normalidad.