Vídeos pornográficos falsos con caras de personas reales: Un abogado explica qué hacer si apareces en uno

Los 'deep fake' son vídeos hiperrealistas en los que crees estar viendo a una persona que en realidad no es, es falso. Su número se duplica cada 6 meses, acaparan más de 130 millones de visualizaciones y el 90% de estos vídeos son pornografía creada por inteligencia artificial y sin el consentimiento de las personas afectadas. Imagínate que alguien coge unas imágenes tuyas de internet y, con ellas, crea un vídeo pornográfico en el que parece que eres tú el que está ahí, y ese vídeo comienza a correr por redes sociales.

Un caso ha sido el de la creadora de contenidos QTCinderella, que ha denunciado la situación entre lágrimas y dolor, y que cuenta que han creado una secuencia pornográfica con Inteligencia Artifical en la que todo es falso, salvo el daño que le han creado a ella. “Esta la imagen del dolor”. Borja Adsuara, abogado y experto en derecho digital y en protección de datos, ha analizado las consecuencias en La Tarde, ya no sólo de este caso, sino de cualquier escenario en el que, incluso una persona anónima (compañera de trabajo o amiga) puede ser víctima.

“En el fondo lo que se está haciendo es crear una falsa realidad, por lo que no se puede acusar de revelación de secretos, sino crear una imagen realista que perjudica a su integridad moral y a su derecho a la propia imagen”, explica en COPE.

¿Por qué se crean estos vídeos pornográficos falsos?

Así, Adsuara aclara en La Tarde que “hay múltiples motivaciones, incluso hay foros en internet donde antes se hacían montajes con Photoshop como homenaje a las cantantes o actrices de las que eran fans”. Eso sí, apunta que “lo peligroso es que no hay una percepción de que se está cometiendo un delito”. “El otro caso, el más numeroso, es porque se quiere exponer a la humillación pública a una persona, lo que demuestra que la sociedad está bastante enferma porque termina revolviéndose contra la víctima en lugar del que hace el vídeo”, asegura el experto en derecho digital.

Y es que, explica, el derecho a la propia imagen, es una intromisión ilegítima que alguien use tu imagen sin consentimiento. Pero también a tu integridad moral y a tu honor porque te ponen en un contexto pornográfico que perjudica la imagen de tu intimidad. “Hay un debate jurídico porque, al no existir esa imagen en la realidad nadie puede acusar de que es revelación de secretos, pero la gente piensa que sí es verdad”, añade.

¿Qué hago si aparezco en uno?

Ahora bien, y si, como QTCinderella, salimos en uno: ¿qué hacemos? “No hay un vacío legal, otra cosa es que las leyes sean las adecuadas. Es algo similar a la porno venganza, existe la vía administrativa porque la Agencia Española de Protección de Datos tiene un canal prioritario para poder borrar estos contenidos de las redes sociales. También puedes usar la vía civil para pedir una indemnización y, en los casos más graves, incluso la vía penal por un delito contra la intimidad o uno contra la integridad moral”.

Por eso, el experto aconseja denunciarlo: “aunque fuera cierto, nadie tiene derecho a exponer tu intimidad. Pero, incluso en los casos que no es cierto, ya hubo un caso de una fotografía de Teresa Rodríguez por el que el TS dijo que no es tan importante que sea verdad sino que se presente como verdad, porque la intención es la misma”.

Otro caso que recuerda el abogado es el de un soldado que difundió la foto de una mujer desnuda en la ducha con la frase “¿quién creéis que es?”, dando a entender que era una compañera. No era ella, pero él fue condenado igual porque la intención era humillarla igual.