La tecnología al servicio de la salud mental: "Estar detrás de la pantalla les ayuda a no sentirse expuestos"
La psicóloga clínica Patricia Revilla ha explicado en 'Lo que viene' los beneficios que puede tener para algunos pacientes hacer la terapia online o usar la realidad virtual
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Afortunadamente, desde hace un tiempo se está visibilizando cada vez más la salud mental. Como consecuencia de la pandemia, además, el número de personas que asisten al psicólogo ha aumentado de manera exponencial. Y, de hecho, también a raíz del coronavirus han surgido otras herramientas para complementar la terapia, como pueden ser los relojes inteligentes o la realidad virtual.
La tecnología puede ayudar a tratar estas patologías, por ejemplo, a la hora de atender a los pacientes a través de una videollamada, algo que en ocasiones puede ser más cómodo para la persona que está en terapia. "Ahora mismo el 50% de los pacientes que tengo los atiendo online, un montón en comparación con antes de la pandemia, que no atendía a nadie", reconoce la psicóloga clínica Patricia Revilla, que comenta que precisamente tras el coronavirus han venido muchas personas a su consulta con "situaciones que han salido a la luz por todo el estrés y la incertidumbre que hemos vivido".
Una de las principales patologías que han surgido debido a los confinamientos, según la psicóloga, es lo que se conoce como síndrome FOMO (siglas de "fear of missing out"), que básicamente consiste en un miedo a perderse cosas y a no estar a la última en cuanto a información. "Lo he visto mucho, sobre todo, en adolescentes o en gente joven, producido por el exceso de información y de exposición a las redes". También destaca Revilla el auge de la nomofobia, es decir, el miedo a estar sin móvil que sucede, por ejemplo, cuando te lo dejas olvidado en casa.
¿Es igual de efectiva la terapia online?
Debido a la popularidad de las terapias online, es lógico preguntarse si son igual de efectivas y funcionan igual que una consulta presencial, algo que no duda Patricia Revilla. "En general funciona bien, pero depende también de la problemática y de la persona que acude a la consulta. Hay personas que son muy tímidas o un poco evasivas y, de alguna manera, esconderse detrás de la pantalla, tenerla como un filtro, les ayuda a no sentirse tan expuestas. De no ser por la terapia online, esas personas quizás no acudirían a pedir ayuda". Al hacer la terapia en un lugar conocido como es su propia casa, "hace que las personas bajen sus defensas, se relajen más y el vínculo terapéutico entre paciente y psicólogo se refuerza". Pero, por otro lado, la psicóloga recuerda que hay personas que necesitan mucho el contacto directo y acudir presencialmente a la consulta.
Realidad virtual para enfrentarse a situaciones reales sin miedo
En cuanto al uso de gadgets, como los relojes inteligentes, y de aplicaciones que pueden ayudar a la terapia del paciente, Revilla opina que va a resultar positivo siempre que se usan bien y de manera sana. "Todos los nuevos productos y apps al final nos dan información sobre nuestro estilo de vida, y eso para los terapeutas siempre es muy útil porque es más información sobre la persona a la que podemos ayudar mejor".
Más en concreto, la psicóloga clínica ha puesto en valor el uso de la realidad virtual para exponer a personas a cosas que a lo mejor les cuesta enfrentarse. "Todo lo que nos acerque más a la experiencia real puede ser un paso intermedio para que la persona vaya afrontando sin miedo y superando barreras y bloqueos", apunta Patricia Revilla. Reconoce incluso que ha utilizado alguna vez Google Maps en sus terapias para ayudar a superar duelos y que el paciente pueda despedirse de alguna manera de lugares y personas.