¿Cómo puede afectar la crisis económica argentina en una posible victoria de Milei en las elecciones?

Argentina vota este domingo para elegir a su próximo presidente que gobernará el país desde el próximo 10 de diciembre por el período 2023-2027, como relevo del peronista Alberto Fernández, que decidió no presentarse a la reelección. Unas elecciones generales determinantes para el futuro de los argentinos, con tres candidatos con la fuerza suficiente para tratar de ganar en las urnas: el líder de La Libertad Avanza (derecha), Javier Milei, quien fue el más votado en las primarias de agosto y es el máximo favorito; el actual ministro de Economía, Sergio Massa, quien representa a la coalición oficialista Unión por la Patria (peronismo); y la aspirante de Juntos por el Cambio (centroderecha), Patricia Bullrich.

En cuanto a una posible llegada de la ultraderecha de Milei al Ejecutivo argentino, "las posibilidades son muy altas", augura Armando Jiménez, profesor del grado en Relaciones Internacionales de la Universidad Francisco de Vitoria. Según las últimas encuestas antes de los comicios, salvo una excepción, todas las empresas dedicadas a realizar estos sondeos le dan como ganador.

Para comprender estos resultados que con gran probabilidad se cumplirán al término de la jornada electoral, el profesor considera que hay que tener en cuenta el contexto en el que se encuentra el país en el momento en el que se están celebrando las elecciones. "Argentina está viviendo una crisis económica terrible, con una inflación del 138% y con una devaluación continua de su moneda". De hecho, recuerda que las primarias donde salió Milei elegido tuvieron un gran impacto económico, momento en el que se devaluó el peso argentino.

Por otro lado, Armando Jiménez señala que el contexto político actual también es poco común, y es que cuando "normalmente hay fuerzas peronistas y antiperonistas, ahora tenemos tres actores". Algo que ha desembocado en un rechazo a las formas tradicionales, un voto de protesta y, sobre todo, a "llevar a un candidato sin un partido fortalecido, con tradición, a competir y posiblemente a ganar las elecciones presidenciales", subraya el profesor.

Sin embargo, a pesar del apoyo abrumador que parece tener Milei, es probable que no llegue a alcanzar mayoría. Si ningún candidato alcanza un 45% de los votos o al menos un 40% y 10 puntos porcentuales sobre el siguiente más votado, deberá celebrarse una segunda vuelta el 19 de noviembre. "El voto está muy dividido", como se pudo comprobar ya en las primarias, tal y como indica Jiménez.

Si finalmente se diera esa segunda vuelta, el profesor apunta que "hay cierta preocupación en Argentina por las medidas drásticas que pudiera llevar a cabo Milei". Con lo cual, esto podría permitir que algunos de los más conservadores dentro del peronismo dieran su voto a la candidata conservadora Bullrich para evitar el "mal mayor" de que la extrema derecha de Milei llegara al poder.

Lo que sí parece evidente es que Argentina se enfrentará a un cambio de rumbo en su Gobierno, ya que el candidato peronista, Sergio Massa, no parece que vaya a obtener apoyos suficientes para que el peronismo siga gobernando. Y es que el actual ministro de Economía en un país con una crisis económica tan grave quizás no sea el candidato más oportuno para conseguir una victoria, según apunta Jiménez. "Él se defiende diciendo que llegó en la última etapa y que hizo una serie de acciones que han permitido tener cierta estabilidad, pero lo cierto es que todavía hay una enorme volatilidad en la moneda y hay unas expectativas de los mercados muy a la baja respecto a una recupración rápida y consolidada".

Veremos en qué se traducen finalmente los resultados de estas elecciones en Argentina, en los que 35 millones de argentinos están llamados a las urnas a lo largo de este domingo, y si suponen un regreso de la derecha en los gobiernos en Latinoamérica.