¿Cómo puedo saber si hay una cámara espía en una habitación?

Más de 200 vídeos de mujeres desnudas. Este es el archivo que guarda en su ordenador un enfermero de la Universidad Carlos III de Madrid. Con una cámara oculta, grababa a las pacientes que acudían a la consulta. Un caso que no es para nada aislado. Sin ir más lejos, como te contaba el martes, continúa abierta la investigación sobre las grabaciones que sufrieron más de 80 mujeres, varias menores, mientras orinaban en un callejón de San Cibrao, Lugo, durante las fiestas de la localidad. Los vídeos acabaron en páginas porno. Además, en las últimas semanas, varios usuarios de una cadena online de apartamentos turísticos han denunciado que encontraron cámaras espías en sus habitaciones.

Actualmente, en España, el ser grabado sin consentimiento por un dispositivo de espionaje es un delito penal, ya que la grabación atenta contra el derecho fundamental a la intimidad. Este tipo de delitos están aumentando. La tecnología cada vez es más sofisticada y cualquier objeto cotidiano puede ser susceptible de ser una cámara de vídeo. "Cualquiera puede adquirir este tipo de cámaras. Las malas noticias crean una fama injusta. Se pueden usar con fines positivos", ha explicado Luis, experto y vendedor de cámaras espías.

"Dependiento del tipo de cámara, el precio puede oscilar entre los 150 y los 400 euros", ha afirmado Luis. Las más caras son las más sofisticadas. Esconden sus lentes en objetos cotidianos como relojes de mesa, lámparas, percheros, altavoces e, incluso, botellas de agua. "Detectar la presencia de estas cámaras es bastante complejo. Existen dispositivos que nos pueden ayudar a encontrar las lentes de la cámara. Esta es la mejor opción. Se debe buscar en internet qué objetos pueden contener una cámara. Si se detecta ese objeto en la sala, hay que tratar de buscar el agujero en el que está colocado el minúsculo objetivo de la cámara", ha matizado Luis.

En la mayoría de los casos, las víctimas no son conscientes de haber sido grabadas hasta que encuentran su vídeo colgado en redes sociales o subido a una página pornográfica. En esta situación, ¿qué herramientas legales tiene la víctima? Según el abogado penalista, Juan Gonzalo Ospina, ante la gravedad de los hechos, recomienda denunciar lo antes posible para atajar la difusión de los vídeos. "Como se tienen que practicar diligencias urgentes, mi consejo es denunciar lo antes posible en el Juzgado de Guardia y solicitarle al juez instructor que inste a la página web o a la red social en la que está el vídeo subido a retirar el archivo.Otra opción es denunciar lo ocurrido a través de los mecanismos internos de la propia plataforma y que sea ésta la que corrija y retire los vídeos que se están difundiendo sin el consentimiento de su titular", ha recomendado Ospina.

Por tanto, hay que estar vigilante, revisar bien todos los objetos que hay una sala porque pueden ser susceptibles de contener una cámara y, en caso de haber sido víctima, denunciar lo antes posible.