Vega de Santa María, un pueblo al que el Covid le ha arrebatado el 15% de su población, a su alcalde y al bar

Javier Jiménez, vecino: "Los mayores acudían al hospital con cualquier dolencia distinta a la del coronavirus y se contagiaban"

Redacción Mediodía

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En casi dos años de pandemia, 99.410 personas han fallecido por coronavirus. Han sido casi 100.000 personas la que han perdido la vida por esta causa en ciudades y en pueblos, unos más poblados que otros.

En estos últimos, en esos donde la gente se conoce de sobra, el tradicional “toque a muerto”, que avisa que avisa de que alguien del pueblo acaba de fallecer. Y ese toque de campanas ha sonado más en unos pueblos que en otros. En uno donde más ha sonado es el pequeño pueblo de Vega de Santa María, en Ávila. En el año 2020, cuando no había ni mascarillas ni vacunas, llegaron a escucharse en seis ocasiones por fallecimientos relacionados con el coronavirus.

En ese mismo año subió el índice de mortalidad del Vega de Santa María hasta un 400% más que en un año normal. Han perdido, en esta pandemia al 15% de su población. Es cierto que el número de personas fallecidas no es muy alto, pero es muy significativo si vemos la cifra de sus habitantes y es que son 77 vecinos empadronados y únicamente 40 viven todo el año.

Ahí está el verdadero drama de esta situación, porque esas bajas han hecho que pueblos como Vega de Santa María queden aún más despoblados de lo que lo estaban. Y eso se nota, por ejemplo, en los presupuestos, que sirven para mejorar la vida en el pueblo. El coronavirus se llevó en este pueblo a su alcalde, Modesto Jiménez, pero es que también acabó con el bar que tenían, porque la persona que lo llevaba terminó por abandonar el negocio.

Pero en Vega de Santa María también hay personas como Javier, que siguen apostando por traer vida a su pueblo, por contrarrestar ese tsunami devastador que ha significado el COVID en lo que llamamos la “España vaciada”. Javier Jiménez, vecino de Vega de Santa María, ha pasado por los micrófonos de Mediodía COPE. "Estamos hablando de una población mayor que ya tiene sus dolencias y que se acude a los hospitales, era allí donde se contagiaban y lo lamentable del caso es ver como una y otra vez acudían al hospital con cualquier dolencia distinta a la del coronavirus y no volvían" ha contado.

A diferencia de lo que ha sucedido en Vega de Santa María, la mayor parte de los pueblos de menos de 500 habitantes tuvieron muy pocos contagios y muy pocas muertes durante los peores meses de la pandemia. Según el Instituto Nacional de Estadística, 626 localidades salieron ‘ilesas’ de aquellos fatídicos meses.