Cuentan con una central térmica que lleva la calefacción a 19.000 radiadores. Vídeo: J.C. Matamoros

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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El Consejo de Ministros ha aprobado este martes un nuevo paquete de medidas que pretende reducir la factura energética de los consumidores, disparada tras la invasión rusa de Ucrania, con una movilización adicional de 3.000 millones de euros que permitirán proteger al 40 % de los hogares españoles como anunciaba Pedro Sánchez en el Congreso de los Diputados la semana pasada.

Una de esas medidas es la creación de una tarifa regulada (TUR) para las comunidades de vecinos con calderas centralizadas de gas, que hasta ahora no podían optar a este tipo de tarifas más asequibles que las del mercado libre al superar el consumo anual máximo permitido de 50.000 kilovatios hora. Esta nueva tarifa regulada estará vigente hasta finales de 2023, y permitirá que 1,7 millones de hogares reduzcan su factura a más de la mitad, según los cálculos del Ejecutivo, al limitar el incremento trimestral de los precios, como ocurre actualmente con las tarifas reguladas existentes.

Pero, ¿llega a tiempo la ayuda para estas comunidades de vecinos? En Mediodía COPE hemos conocido la realidad que están viviendo en una de las comunidades de vecinos más grande de España, con 8.500 vecinos tiene más población que algunos pueblos y no solo de la España vaciada.

La Comunidad de vecinos Virgen de la Esperanza del barrio de Hortaleza de Madrid, es una supracomunidad, la más grande de toda España con 175 bloques y 3.300 viviendas. Toda una pequeña ciudad, "un laberinto de torres blancas de 16 alturas y otros de tan solo cuatro plantas, se autoabastece en materia energética con una central térmica que se compone de cinco calderas que han ido cambiando y modernizando con los años. Esa última actualización con 40 kilómetros de tuberías que terminan 19.000 radiadores, les costó dos millones y medio de euros" relataba Belén Miguel que ha estado hablando con algunos vecinos y la presidenta de la Comunidad que tuvo que poner un recibo extra, tuvieron que aprobar una derrama para poder pagar los dos primeros recibos de este invierno para poner la calefacción.

Julia Vicente, la presidenta está esperanzada en la ayuda que ha aprobado el Gobierno, pero no duda en calificar la medida como tardía, "estamos esperando qué nos dice el Gobierno, porque se lo preguntamos en el mes de abril y nos ha contestado ahora cuando ya todas las mancomunidades hemos firmado un contrato con las comercializadoras".

La mayoría de los vecinos son jubilados y algunos con pocos recursos y tienen que asumir pagar 400 euros de recibo algunos meses. Los datos son drásticos, han llegado a pagar hasta 800.000 euros de gas en un solo mes, antes de la crisis de Ucrania pagaban 200.000 euros, bastante menos.

La situación que viven los vecinos de Virgen de la Esperanza es la que sufren muchas comunidades de vecinos que tienen los servicios centralizados.