Un librero de Lugo reclama la venta de libros en la calle

Los aforos se han convertido en uno de los caballos de batalla en la transición a la nueva normalidad. Una solución para el sector de la hostelería fue la habilitación de espacios de terrazas, no obstante, ante la inminente vuelta al cole, las tiendas de libros, las zapaterías infantiles o las de ropa de niños están llenas...

El propietario de la Librería Galicia, Fernando Toubes, ha presentado tres solicitudes al Ayuntamiento de Lugo para que le permitan, como a los hosteleros, instalar “un mostrador” en el espacio público urbano para evitar las “aglomeraciones” de gente dentro de su negocio. El dueño nos cuenta: “Todavía no tenemos una respuesta definitiva. “Estamos a la espera pero claro, el tiempo se nos echa encima”.

La situación de la incertidumbre provoca dudas en los clientes a la hora de reservar el material escolar, dejando muy poco margen de tiempo para las librerías, que temen un “efecto embudo” en sus establecimientos.

Parece que este año, que está siendo especialmente complicado por la incertidumbre en la fecha del comienzo de curso y si los niños acudirán a las clases o no, puede haber más caos en la entrega del material. Fernado alude a la indecisión de las familias: “Se están disipando un poco gracias a las noticias que salen, por parte de la Xunta, de que sí va a haber clases presenciales. Y automáticamente es ahí cuando hay un punto de inflexión y los clientes empiezan a reservar”.

El propietario de este negocio pide al Ayuntamiento que le permitan instalar un mostrador en la vía urbana con el fin de evitar grandes concentraciones de clientes. “Nos estamos organizando a nivel interno con nuestras compañeras para que desde dentro podamos trabajar, pero a la vez vamos a incorporar tres compañeras más para momentos puntuales como el inicio de curso”, asegura Fernando.