Custodiar la vida desde las entrañas

Este sábado concluye en Madrid el 27 Congreso Nacional Provida en el que se reúnen los miembros de las plataformas y asociaciones de todo el país implicados en la defensa de la vida. Si hay alguien que defienda la vida esa es Paloma Carmona, madre de 15 hijos, que ha convertido a su familia en la más numerosa de Madrid. Lleva 40 años de matrimonio y tuvo su primer bebé con 20 años, solo 15 meses después de casarse. Bueno, pues ayer, fue premiada por el Gobierno regional por su esfuerzo y dedicación a su gran familia.

Un reconocimiento importante y necesario cuando habitualmente, bien lo sabemos, desde el ámbito político no siempre se trata a la familia como se merece; cuando, como ella misma dice, la sociedad no da valor a la familia ni a la vida en sí, y mucho menos a lo de ser madre.

Paloma que estudió administrativo decidió trabajar en casa para cuidar de su familia, lo que le ha permitido dedicarse en cuerpo y alma a ellos. Cuenta que lo de ser madre ha sido una carrera sin meta entre su marido y ella y, por supuesto, con la ayuda de Dios y de la Virgen María; una fe vivida y sostenida además en su Comunidad del Camino Neocatecumenal.

En estos tiempos de tratar de intentar prever todo, hasta el número de hijos, ejemplos así ayudan a desprenderse de esa mentalidad social tan extendida de que los hijos coartan la libertad.

La familia hace que las personas vivan en armonía; una actitud muy de equipo. En esa casa seguro que comprenden bien lo que dice el Papa; la familia unida está formada por personas diferentes que se quieren, se respetan y procuran aprender unas de otras, con sus límites y sus defectos; pero, sobre todo, con un amor verdadero, aprendiendo de la humildad y la misericordia del Señor.

Hay que dar las gracias por ese esfuerzo y dedicación total a esa enorme gran familia cristiana, por ese testimonio tan necesario en la defensa y custodia de la vida como regalo de Dios.