La dificultad para vivir solo de alquiler: “Por menos de 900 euros...”

Los precios de los alquileres de pisos seguirán subir, a pesar de que la Ley de Vivienda buscaba controlarlos

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La subida de los precios de alquiler dificulta encontrar una vivienda para vivir solo

Redacción Mediodía

Publicado el - Actualizado

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La Ley de Vivienda buscaba controlar los precios del mercado, pero está teniendo un efecto no deseado. Está complicando el alquiler para familias y jóvenes y los precios se han disparado.

Ya no es un problema sólo de Madrid y Barcelona. Ahora, en la mayor parte de España podemos encontrar precios desorbitados.

2.000 euros de sueldo no son suficientes para alquilar un piso

Incluso con 2.000 euros de sueldo es misión imposible alquilar un piso en determinadas ciudades, como explica en 'Mediodía COPE' Claudia Cid. "Con ese salario, solo se puede vivir holgadamente en 24 municipios españoles. Y en una de cada cinco ciudades españolas cobrar 2.000 euros limpios, no llega para pagar un alquiler en solitario".

"Por menos de 900 euros no encuentras nada decente" para vivir, cuenta a COPE un joven que señala, además, que "hay que sumarle más gastos que son más grandes cuando estás solo".

Un piso de 80 metros cuadrados cuesta 921 euros de media y sin incluir los gastos de la vivienda se come el 46% de un sueldo de 2.000 euros. Una tasa que se sitúa por encima del 30% recomendado por los analistas para poder vivir desahogado.

Estamos, ante todo, asistiendo a un problema de desequilibrio entre la oferta y la demanda. Por eso, siempre se plantea como solución primordial la de construir viviendas y sobre todo, favorecer que las que están vacían se pongan en alquiler.

Cosa que parece que esta nueva Ley no está consiguiendo de momento. Pero, ¿qué más se puede hacer? Lo primero que recomiendan los expertos es mejorar la seguridad jurídica del sector, así como incentivar con menores impuestos a los propietarios.

También se debería establecer una colaboración público-privada con los grandes tenedores de vivienda, como los bancos. Y no podemos olvidarnos de crear un pacto de estado por la vivienda que no cambie cada cuatro años y en el que intervengan todos los agentes del sector, tanto propietarios como inquilinos.

De momento, en cualquier caso, todos los análisis apuntan a que esto solo acaba de empezar y que los precios van a seguir creciendo. Es verdad que lo harán un poco más despacio, se ralentizan, pero la subida no va a parar de momento.