Rusia impone nueve días de vacaciones a todos sus ciudadanos para frenar el avance del COVID

Por segundo día consecutivo, Rusia ha registrado su peor dato de fallecimientos por COVID en lo que llevamos de pandemia. En las últimas 24 horas, se han notificado 1.123 fallecimientos. Además, ayer se detectaron más de 36 mil casos positivos.

Para poner freno al avance de la pandemia, el Gobierno de Putin ha decidido instaurar nueve días 'no laborables'. En todo el país, estas vacaciones obligadas comienzan el día 30, aunque en Moscú, una de las zonas más afectadas, se implementa desde hoy mismo.

Durante estos nueve días, todas las empresas del país deben permanecer cerradas. Ni siquiera se contempla la fórmula del teletrabajo. Un modelo que ya se practicaba en Rusia mucho antes de la llegada del Covid, pero que no tiene cabida en este plan de choque aprobado por el Kremlin.

Unos días de asueto que podrán disfrutar en la calle, ya que la medida no implica confinamiento domiciliario. Eso sí, Putin ha solicitado a los mandatarios regionales que no permitan la celebración de eventos de ocio entre las 11 de la noche y las 6 de la mañana.

"Este parón lo han hecho en base a la Fiesta Nacional, que se celebra durante esta semana. Han querido que coincida para que no se produzcan masificaciones", ha explicado Marcos.

Ahora mismo, en todo el país, todos los establecimientos se encuentran cerrados. En Moscú, los restaurantes y los centros comerciales ya tienen los accesos clausurados. Los gobierno regionales están decidiendo cuándo implementar la medida. En San Petersburgo, por ejemplo, es a partir de mañana.

"En todos los centros comerciales y en las tiendas, cuando están abiertas, hay un cartel que te advierte de que si no llevas mascarilla, no serás atendido. Pero la gente se ha relajado. Sí es cierto que nunca ha sido obligatoria en la calle", ha comentado Marcos.