¿Es peligroso nadar con tiburones? Una experta en oceanología cuenta su experiencia

Gádor Muntaner es oceanóloga especializada en estos animales y ha pasado por 'Poniendo las Calles' para confesar cómo fue su primer encuentro con ellos y por qué adora tanto el mar

Redacción Poniendo Las Calles

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Tan solo con oír la melodía de la película Tiburón de Spielberg nos imaginamos como uno de ellos se acerca y nos devora un brazo como mínimo. Desde siempre, estos animales han sido considerados como grandes monstruos depredadores, pero la oceanóloga especializada en tiburones, Gádor Muntaner dedica su vida a demostrar que esa es una de las muchas mentiras que se han divulgado sobre esos seres. Le fascina nadar con ellos sin jaula ninguna donde encerrarse porque para ella son unos incomprendidos del ecosistema marino.

Muntaner se identifica con la siguiente frase de Jaques Cousteau: “La gente protege aquello que ama, pero sólo podemos amar aquello que conocemos” y es por eso que hoy pone las calles con nosotros para enseñarnos la verdadera cara de estos animales.

En primer lugar, Gádor Muntaner ha explicado por qué es una enamorada confesa de su profesión y ha contado la anécdota que la llevó a querer dedicarse a ello: “La verdad es que es una profesión poco común, cada vez más por suerte”. La verdad es que yo estoy enamorada del mar desde que tengo uso de razón. Desde muy pequeñita siempre he estado muy cercana a él y como a los 15 o 16 años tuve la oportunidad de hacer un viaje con mi madre a las islas Maldivas y la convencí para sacarnos el curso de buceo. Y allí, pues se me abrió una ventana más todavía hacia ese mundo submarino del que me enamoré y encima fue también cuando vi mi primer tiburón y fue amor a primera vista”.

Además, la oceanóloga especializada en tiburones ha resaltado lo mal que lo pasó durante las últimas noches previas a ese viaje que tantas ganas tenía de hacer: "Justo antes de hacer ese viaje, estuve una semana teniendo pesadillas por las noches porque sabía que iba a un sitio que me iba a meter al agua, que podía encontrarme tiburones. Y claro, yo había visto las mismas películas que hemos visto todos como “Tiburón” y había leído las mismas noticias y pensaba “madre mía, me encanta el mar, pero no sé yo si es peligroso nadar con tiburones. Entonces yo esperaba sentir miedo, estrés... Y cuando vi mi primer tiburón en las Maldivas, pues justo fue todo lo contrario a lo que me esperaba, una sensación de paz y de admiración hacia un animal que precisamente era maravilloso, súper tranquilo e incluso tenía una mirada hasta inocente. Entonces, pues dentro de que me encanta todo lo del mar y me encantan animales como las ballenas y los delfines, también pensé que los tiburones necesitan un poquito más nuestra ayuda porque no tanta gente empatiza con ellos”.

¿Y cómo vivió Gádor Muntaner los segundos previos a entrar en contacto con el agua y con el tiburón de turno que merodease por la zona en ese momento?: “El momento previo antes de irme al agua sí que tenía muchísimo miedo. Iba un poquito así que digo “bueno vale, lo hago porque tengo que intentarlo porque si me encanta el mar, pues tengo que ver un tiburón alguna vez, pero bueno, me salgo rápido”, y fue todo lo contrario. Me metí con nervios y a la que lo vi se me fueron todos esos sentimientos y se intercambiaron por los que te digo. Porque realmente el pobre animal hasta tenía más miedo él de mí que yo de él, iba con súper cuidado, y si tú te acercabas se iba nadando”.