Un profesor asegura un mayor éxito académico si haces esto con tus hijos en casa: "Niños de tres a seis años"
A través de unos cuentos, Alfonso Moreno y la ilustradora Elena de Andrés muestran los beneficios de la meditación, como le cuentan a Carlos Moreno 'El Pulpo'
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En un mundo cada vez más acelerado y lleno de estímulos, la meditación ha emergido como una herramienta poderosa para ayudar a los niños a gestionar sus emociones y mejorar su rendimiento académico. Según el profesor y experto en mindfulness, Alfonso Moreno, el éxito académico de los niños puede verse beneficiado significativamente si se introducen prácticas de meditación en casa, especialmente para aquellos entre tres y seis años.
En su intervención en Poniendo las Calles con Carlos Moreno 'El Pulpo', el maestro, junto a la ilustradora Elena de Andrés, destacó los beneficios de la meditación a través de una colección de cuentos diseñada específicamente para enseñar a los más pequeños. Los estudios han demostrado que la meditación puede contribuir a mejorar la atención, reducir la ansiedad y facilitar un mejor control de los impulsos.
Estos beneficios son especialmente relevantes en la educación, donde la capacidad de concentración y la gestión del estrés son cruciales para el éxito académico. "La meditación infantil es similar a la de los adultos, pero adaptada a sus necesidades", explicó Moreno. Se busca que los niños aprendan a respirar correctamente, mantener una postura adecuada y gestionar sus emociones.
Los cuentos que han creado Moreno y De Andrés, bajo el título "Comenzar a Meditar", son una vía para introducir estos conceptos de manera lúdica y accesible. El protagonista, un niño llamado Bruno, se enfrenta a diferentes situaciones donde la meditación le ayuda a calmarse y enfocarse, lo que permite a los pequeños lectores identificarse con él y aprender a aplicar estas técnicas en su vida diaria.
Un profesor asegura un mayor éxito académico
Incorporar la meditación en la rutina diaria de los niños no tiene por qué ser complicado. Moreno sugiere comenzar con momentos cortos de meditación, centrándose en la respiración y el silencio. A través de ejercicios simples, como contar las respiraciones o visualizar un lugar tranquilo, los niños pueden aprender a encontrar su calma interior. La duración de estas meditaciones puede ser gradual; con el tiempo, se puede aumentar a medida que los niños se familiarizan con la práctica.
Además, es importante crear un ambiente propicio para la meditación en casa. Esto puede incluir un espacio tranquilo, libre de distracciones, donde los niños se sientan cómodos. Utilizar elementos visuales, como libros ilustrados que representan emociones con colores, puede ayudar a los pequeños a conectar mejor con lo que están sintiendo. Según De Andrés, los colores tienen un impacto directo en las emociones, y utilizar una paleta adecuada puede enriquecer la experiencia de meditación.
Los beneficios de la meditación no solo se limitan al presente. Según los especialistas, los niños que meditan regularmente tienden a tener un mejor desempeño académico y a presentar menos problemas de hiperactividad y ansiedad. Esto se debe a que la meditación ayuda a entrenar la mente, fomentando una mayor capacidad de concentración y un enfoque más sereno ante los desafíos.
El deseo de Moreno y De Andrés es que las próximas generaciones aprendan a manejar sus emociones desde una edad temprana. "Queremos que los niños crezcan con las herramientas necesarias para afrontar la vida sin que sus miedos les frenen", afirmaron durante la entrevista. Este enfoque proactivo puede tener un impacto duradero no solo en el rendimiento académico de los niños, sino también en su bienestar emocional a lo largo de su vida.
Si haces esto con tus hijos en casa
Integrar la meditación en la vida de los niños puede ser una de las claves para su éxito académico y emocional. A través de cuentos y prácticas diarias, los padres pueden fomentar un ambiente que les ayude a desarrollar habilidades valiosas.
Con la guía de expertos como Alfonso Moreno y la creatividad de ilustradores como Elena de Andrés, los padres tienen a su disposición recursos efectivos para enseñar a sus hijos a encontrar la calma y el enfoque en un mundo lleno de distracciones. Así, la meditación se convierte en una inversión en el futuro de los niños, preparándolos para enfrentar los desafíos de la vida con confianza y serenidad.