Trabaja en la única tienda en el mundo de su sector y le llama el Real Madrid para un pedido especial: "En el Bernabéu"

En pleno centro de Madrid, en la histórica Ronda de Atocha, se encuentra un comercio único en el mundo: Muelles Ros, la única tienda dedicada exclusivamente a muelles. Fundada en 1894, esta tienda ha sobrevivido a lo largo de los años gracias a su especialización y la calidad de sus productos, convirtiéndose en un referente para profesionales y particulares. Carlos Rodríguez, encargado de Muelles Ros, ha dedicado más de 20 años de su vida a este singular negocio, y recientemente vivió una de esas experiencias que marcan la historia de un comercio: una llamada del Real Madrid.

Muelles Ros fue fundada por Luis Boixadera, quien comenzó el negocio en el barrio de Chamberí antes de trasladarse a la actual ubicación en la Ronda de Atocha en los años 50. La tienda se ha mantenido en manos de la misma familia durante más de un siglo, adaptándose a los cambios, pero siempre centrada en su especialidad: los muelles, en sus diversas modalidades y tamaños. Actualmente, la tienda cuenta con más de 7.200 referencias diferentes.

Carlos Rodríguez, quien trabaja en Muelles Ros desde hace más de 20 años, detalla que los muelles se utilizan en una enorme variedad de aplicaciones: desde la suspensión de coches, mecanismos de puertas, hasta en dispositivos tan cotidianos como las tijeras. "Cualquier cosa mecánica lleva un muelle", comenta Carlos, quien resalta la diversidad de su oferta, que incluye desde los muelles más pequeños, utilizados en aparatos electrónicos, hasta los gigantes que fueron empleados en el mantenimiento de la M30.

Uno de los episodios más curiosos y significativos en la historia reciente de Muelles Ros ocurrió antes de la última remodelación del Estadio Santiago Bernabéu. Carlos Rodríguez relata que un equipo de trabajo que estaba a cargo de la renovación del césped del estadio se presentó en la tienda buscando un muelle muy específico para sus máquinas de plantado de césped.

La única tienda en el mundo de su sector

"Nos llamaron y nos dijeron: '¿Tenéis este muelle?', lo curioso es que no lo teníamos en stock, pero como también somos fabricantes, conseguimos fabricarlo en un par de días", explica Carlos. El muelle fue utilizado en las máquinas que se encargan de plantar el césped en el Bernabéu, justo antes de que el equipo comenzara a jugar nuevamente allí. La rapidez y eficiencia con la que la tienda pudo resolver el problema dejó una marca en la memoria de Carlos, y un cliente tan inesperado como el Real Madrid se sumó a la lista de compradores de Muelles Ros.

La tienda, aunque pequeña en dimensiones —unos 14 metros de largo y 4 metros de altura—, está llena de cajas repletas de los diversos tipos de muelles, ordenados meticulosamente según su tipo y tamaño: de compresión, de tracción y de torsión. Cada tipo de muelle tiene una función concreta, desde los muelles que permiten que un bolígrafo funcione correctamente, hasta los que aseguran la suspensión de un vehículo o el funcionamiento de un televisor.

"Un muelle de compresión es el que lleva, por ejemplo, la suspensión de un coche; el de tracción, como el que encuentras en los somieres de las camas; y el de torsión, como el que tienen los cubos de basura", explica Carlos, quien también comenta cómo muchas veces los clientes se acercan a la tienda para reparar objetos antiguos, como radios o relojes de hace décadas, trayendo su propio muelle roto para encontrar el reemplazo adecuado.

Aunque la mayoría de los clientes de Muelles Ros son profesionales de sectores industriales, la tienda también ha trabajado con empresas de otros sectores, como el cine o el teatro. En una de las anécdotas más curiosas, Carlos recuerda cómo en 2022 la producción de la película "Asteroid City" del director Wes Anderson se acercó a la tienda en busca de muelles para la fabricación de un tren a escala. "Nos pidieron muelles de tamaño real para un tren, aunque no se iban a utilizar para que el tren funcionara, sino para crear el efecto visual en la película", comenta Carlos entre risas.

Le llama el Real Madrid

A pesar de ser un negocio tan peculiar, Muelles Ros ha logrado mantenerse vigente gracias a su capacidad de adaptación y especialización. "Nuestro secreto es ser muy profesionales, dar un buen servicio y tratar bien al cliente. Nos hemos ganado una buena reputación por nuestra experiencia y por la calidad de nuestros productos", asegura Carlos.

El caso del Real Madrid es solo uno de los muchos pedidos especiales que Muelles Ros ha recibido a lo largo de los años. Desde la gran industria hasta el cine, pasando por pequeños arreglos caseros, esta tienda única sigue siendo un pilar en el centro de Madrid, ofreciendo una especialización que no se encuentra en ningún otro lugar del mundo.