Roban una mochila a unos turistas en Barcelona y ofrecen mil euros de recompensa por recuperarla
En los dispositivos electrónicos que les quitaron había cientos de fotografías de un alto valor sentimental
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Long y Kelly decidieron dejar sus trabajos hace unos meses para cumplir su sueño de viajar alrededor del mundo. Esta pareja de jóvenes australianos han estado un mes visitando varias ciudades europeas y el pasado 14 de septiembre llegaron a Barcelona, donde estarían cuatro días. Él asegura que les encantó “el Barça, la ciudad, la gente y las tapas”.
Sin embargo, todo se torció el día 18, cuando se disponían a ir hacia el aeropuerto. A primera hora de la mañana, sobre las 7:15, les robaron. Un grupo de cuatro o cinco hombres se les acercaron por detrás y vertieron café encima de sus bolsas. Se trataba de un movimiento de distracción para llamar la atención de la pareja y poder llevarse su mochila.
En su interior había varios objetos tecnológicos de alto valor económico, como un portátil, un dron o una cámara, entre otros. Long calcula que el importe de lo que tenían en esa mochila supera los 9.000 euros. No obstante, lo que se llevaron los ladrones y lo único que desean recuperar son las fotografías guardadas en el ordenador, en un disco duro y en un micro disco para la cámara.
Su única preocupación, las fotos
Se trata de las fotos de su boda, las cuales el turista describe como de “irreemplazables”. Es por eso que ofrecen una recompensa de 1.000 euros a cualquiera que les pueda ayudar a encontrar las fotografías. Long remarca que solo pretende recuperar las fotos, no el portátil ni los dispositivos externos de memoria.
Especifica los modelos de los dispositivos electrónicos para facilitar la búsqueda de las imágenes. Son un disco duro de marca Seagate de 2TB de capacidad y de color plata, un micro disco para la cámara de marca Sandisk y de 64GB de espacio, y un ordenador ASUS.
En declaraciones a ‘Crimen y castigo’, Long explica que, tras el robo, se dirigió inmediatamente a la comisaría situada en la Plaza de España pero les dijeron que no habría un intérprete hasta las nueve de la mañana. Esto les llevó a desplazarse al aeropuerto, donde interpuso la denuncia.
Cogieron el vuelo a Madrid pero al aterrizar allí confiesa que sintió que “tenía que hacer algo” porque no se quería arrepentir por no haberlo intentado. Lo cual lo llevó a reservar un vuelo de vuelta a Barcelona para ese mismo día. Con la ayuda de un amigo, estuvo caminando por sitios donde se suelen vender objetos robados e imprimió y repartió unas octavillas explicando lo que le había pasado y la recompensa que ofrecía. Después regresó a Madrid, donde tenía que coger un vuelo a Nueva York.
Un hacker habría conseguido la imagen del culpable
Desde entonces ha compartido su historia en Facebook y Twitter, con el objetivo de conseguir la ayuda de la gente. Y asegura que ha recibido mucho apoyo, desde muestras de afecto hasta recomendaciones sobre dónde podrían encontrarse sus objetos para ser vendidos. También se ha ofrecido a ayudarle un agente de policía fuera de servicio, un periodista freelance y un hacker. Este último asegura haber conseguido la imagen del culpable y está intentando ampliarla para que la policía pueda usarla para identificar al ladrón.
Long también cuenta que la policía es consciente de que hay dos cámaras de seguridad en una clínica médica cercana que podrían haber grabado los hechos pero que las autoridades todavía no han solicitado sus grabaciones.
A pesar de todo, el turista destaca que “la ayuda de los barceloneses ha sido excelente”. Y agrega que esto no le va impedir volver a Barcelona a ver al Barça jugando en el Camp Nou, a comer tapas o a pasear por “las bonitas calles de Cataluña”.
Cualquiera que tenga cualquier pista sobre dónde están o pueden encontrarse las fotografías, puede contactar con Long a través de su perfil de Facebook, la dirección de correo electrónico justin.vu295@gmail.com o del teléfono 635 175 162