Tres toreros y un mismo concepto basado en el clasicismo y la pureza

Los diestros Antonio Ferrera, Diego Urdiales y Ginés Marín se anuncian este viernes ante una corrida de Alcurrucén.

Antonio Ferrera, Diego Urdiales y Ginés Marín ante toros de Alcurrucén

Sixto Naranjo Sanchidrian

Publicado el 07 jun 2019, 09:18 - Actualizado 07 jun 2019, 09:21

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ANTONIO FERRERA

Ha sido la gran incógnita de San Isidro tras el accidente que sufrió hace unas semanas en el río Guadiana a su paso por Badajoz. La duda quedó resuelta al triunfar a lo grande el pasado sábado 1 de junio en Las Ventas al cortar tres orejas a la corrida de Zalduendo en una actuación repleta de torería e inspiración. Toreó ayer … Es su tercera y última tarde en este San Isidro.

DIEGO URDIALES

Segunda tarde en este San Isidro de quien fue triunfador de la pasada temporada 2018 en la plaza de toros de Las Ventas. Su inolvidable tarde en la Feria de Otoño ante los toros de Fuente Ymbro que le valió conquistar su primera Puerta Grande en Madrid. Su primera tarde en el San Isidro 2019 se saldó sin premio en la corrida de Fuente Ymbro el día del Santo Patrón. El riojano se ha convertido en torero de culto para algunos aficionados por su concepto del torero y de entender la profesión. La resta aún la Corrida de la Beneficencia.

GINÉS MARÍN

El torero jerezano afronta su tercer y último paseíllo tras cortar una oreja el pasado sábado 18 de mayo ante los toros de Montalvo y rozar la Puerta Grande este miércoles al cortar una oreja y dar dos vueltas al ruedo con la corrida de Garcigrande-Domingo Hernández. Ginés ya sabe lo que es salir a hombros en Las Ventas. Lo hizo en la tarde de su confirmación de alternativa en el San Isidro de 2017. Este joven torero está llamado a ser uno de los relevos del actual plantel de figuras y este año ha comenzado la temporada con triunfos en Olivenza o Palos de la Frontera.

LA GANADERÍA: ALCURRUCÉN

El hierro propiedad de los hermanos Lozano afronta la segunda corrida en este San Isidro después de lidiar un primer encierro en el que predominó la falta de casta aunque propició que Paco Ureña cortarse una oreja. El año pasado lidió un gran toro en la Corrida de la Cultura, 'Licenciado', uno de los toros de la Feria al que cuajó El Juli. Decir Alcurrucén es sinónimo de triunfo en Madrid en las últimas décadas con numerosas puertas grande de toreros gracias a sus toros.