ATLETISMO | LIGA DIAMANTE
Duplantis bate su propio récord de pértiga e Ingebrigtsen pulveriza el crono
Ingebrigtsen y Duplantis batieron los récords del mundo de 3.000 y pértiga, respectivamente. Ingebrigtsen marcó un crono de 7:17.55 y Duplantis situó el listón en 6,26.
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El noruego Jakob Ingebrigtsen y el sueco Armand 'Mondo' Duplantis reclamaron de nuevo los focos del universo deportivo y volaron en la reunión de Silesia, correspondiente a la Liga de Diamante y que se disputó en Chorzow (Polonia), para batir los récords del mundo de 3.000 y pértiga.
Ambos confirmaron de forma tan indiscutible como brillante su condición que les tiene instalados en el trono del atletismo actual, uno cabalgando imparable por la pista y el otro subiendo en esta ocasión al cielo polaco.
Ingebrigtsen, campeón olímpico en París de los 5.000 metros, fue el primero en sacar a relucir sus galones, al batir el récord del mundo de los 3.000 con un crono de 7:17.55, nada menos que 3.12 segundos menos que la plusmarca que poseía el keniano Daniel Komen desde el 1 de septiembre de 1996, cuando corrió la distancia en Rieti (Italia) en 7:20.67. El atleta se mostró una vez más pletórico, inasequible para el resto de rivales.
Duplantis tuvo que esperar un rato más. Su voracidad sigue intacta. Y su posibilidad de mejora, de subir más alto también. En Chorzow comenzó su concurso en 5,62. No falló, como tampoco en 5,92 y 6,00, altura que superaron también el estadounidense Sam Kendricks y el griego Emmanouil Karalis, que estableció un nuevo rédord heleno.
Este último no volvió a saltar y Kendricks falló en 6,08. Duplantis, otra vez solo, esperó a situar el listón en 6,26, un centímetro más que en la inolvidable noche parisina del pasado día 5. Lo derribó en el primer intento y en el segundo, aunque lo rozó, volvió a batir el récord mundial con el francés Renaud Lavillenie, el atleta que le precedió en las plusmarcas de la prueba, como testigo tras haber competido y haber sido eliminado con una marca de 5,62.
Fue de nuevo el broche estelar a un mítin más que atractivo, que reunió a buena parte de las figuras mundiales que encandilaron en los Juegos de París y que depararon numerosos récords de la competición. Hubo revanchas y confirmaciones dentro de un nivel de marcas muy elevado.