Convocado por la sub-18
El hijo de un famoso torero apunta a estrella del fútbol y se estrena con la sub-18
Canterano bético ha sido convocado por primera vez por la selección sub-18. Celebra los goles simulando dar un muletazo como hace su padre en los ruedos.

Morante es una de las grandes promesas del fútbol español.
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José Antonio Morante Antúnez, homónimo e hijo mayor del maestro de La Puebla del Río (Sevilla), ha dado un paso más en su carrera como futbolista al ser convocado por vez primera por el seleccionador español sub-18, David Tenorio, para tres jornadas de entrenamientos en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas.
Le gustan los toros, torea y celebra goles dando lances al aire, como a su padre le gusta el fútbol, lo juega en su finquita de La Puebla y lo vive desde su pasión bética y su amistad con Joaquín Sánchez, de quien dijo que es más torero que futbolista y a quien invita a sus tradicionales encierros del día de San Sebastián.
Morante de la Puebla hijo, zurdo con la pelota, también se ha prodigado al natural con la muleta junto a su padre hasta que, desde la feraz cantera de Coria del Río, vecina a La Puebla, fichó por el Betis en 2022 y, desde entonces, ha ido escalando peldaños en el escalafón verdiblanco hasta erigirse en un puntal del Juvenil A.
A sus 17 años, con la misma edad con la que su padre tomó la alternativa en Burgos, José Antonio Morante Antúnez ha jugado en esta temporada 32 partidos en los que ha marcado doce goles, ha jugado en la UEFA Youth League y ahora ha recibido el premio de ser convocado para la selección española de su categoría.
En ella, compartirá presencia con Thiago Pitarch, jugador del Real Madrid, al que pretende Marruecos. Thiago, nacido en Fuenlabrada el 3 de agosto de 2007, pertenece al juvenil B de la cantera madridista tras sus pasos por Atlético de Madrid, Getafe y Leganés, y ya ha tenido la oportunidad de jugar con el A a las órdenes de Álvaro Arbeloa.
El centrocampista madrileño se ha decantado por la selección española en lugar de la marroquí, que también pretendía contar con sus servicios y es que uno de sus cuatro abuelos es de Marruecos y la selección africana ha querido aprovechar esa circunstancia para robarle a España otro joven talento.