Lonzo ball, de los chicago bulls

El increíble milagro del NBA que ha vuelto a jugar 1.000 días después tras ser el primero en superar esta gravísima lesión

1.006 días después Lonzo Ball volvió a jugar un partido. Le han tenido que trasplantar el menisco y el cartílago de una de sus rodillas. 

Cordon Press

Lonzo Ball ha vuelto a las pistas tras superar una gravísima lesión.

Alex Salguero

Publicado el - Actualizado

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Lonzo Ball volvió a jugar este miércoles con los Chicago Bulls tras un calvario de lesiones que le tuvo lejos de las canchas durante más de dos años. El base, número 2 del draft de 2017, jugó este miércoles 15 minutos en el amistoso de pretemporada que los Bulls ganaron por 125-123 a los Minnesota Timberwolves.

Ball logró 10 puntos (4 de 6 en tiros, 2 de 4 en triples) además de un rebote, una asistencia, un tapón y un robo. Este fue su primer partido con los Bulls desde el 14 de enero de 2022. Ese día sufrió una lesión en su rodilla izquierda. Una rotura de menisco, que en un principio no iba a tenerle fuera de las pistas más de dos meses, y que acabó en un calvario de tres artroscopias y un trasplante de cartilago que le ha tenido fuera de las canchas 2 años, 9 meses y 2 días.

Un total de 1.006 días en los que Lonzo Ball, que solo tiene 27 años, dijo adiós a algunos de sus mejores años con el sueño de volver a jugar al baloncesto profesional. Este miércoles lo cumplió y el United Center lo recibió como se merecía. Una atronadora ovación para un luchador que ha obrado un milagro: "Ni siquiera puedo expresar con palabras cómo me sentí estando allí... Definitivamente fue un momento que nunca olvidaré".

"Me dijeron que me quedaban 18 meses de recuperación tras la tercera cirugía y en ese momento me pareció una locura, pero ahora estoy aquí. Ya es todo cosa del pasado", confesó ante los medios. Lonzo Ball es el primer deportista profesional que vuelve tras serle trasplantados el menisco y un cartilago.

Durante su estancia en la pista no se resintió de la rodilla. Ahora falta ver si puede resistir el ritmo de una competición tan exigente como la NBA en la que se juega cada dos días. De momento, el primer paso ya está dado.

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