En competiciones europeas

El problema de la UEFA con los ultras: Incidentes de San Sebastián a Brujas

A lo ocurrido en el Reale Arena se unen los lamentables hechos de Brujas con los ultras del Saint Gallen tirando fuegos artificiales dentro del estadio.

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Los ultras del Saint Gallen lanzan fuegos artificiales en Brujas.

Redacción Deportes

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Europa ha vivido una jornada de violencia en las gradas que ensombrece lo ocurrido sobre el césped. Unos incidentes que han marcado el arranque de la Europa League y la Conference League y han provocado la vergüenza. 

A lo sucedido en San Sebastián donde los ultras del Anderlecht sembraron el pánico dentro del Reale Arena lanzando todo tipo de objetos desde la altura a los aficionados locales que veían tranquilamente el partido hay que unir lo ocurrido en Brujas.

En el descanso del partido entre el Círculo Brujas y el St. Gallen, correspondiente a la Conference League, los radicales suizos comenzaron a lanzar fuegos artificiales con el marcador 3-0 en contra para su equipo.

La imagen es impactante con decenas de aparatos pirotécnicos volando sobre las gradas del estadio Jan Breydel. Al final los belgas se llevaron la victoria por 6-2 en un encuentro que ha dejado otra fea imagen y ha dejado de manifiesto el problema que hay con los radicales en los estadios.

Un detenido, puesto en libertad en san sebastián

Uno de los detenidos tras los incidentes registrados el jueves en la grada visitante de Anoeta, en San Sebastián ha quedado en libertad, mientras que los otros cuatro están a la espera de pasar a disposición judicial. Según ha informado el Departamento vasco de Seguridad, la persona puesta en libertad era uno de los dos acusados de atentado con la autoridad.

Permanecen en dependencias policiales el otro detenido por la misma razón y los tres arrestados por participar en desórdenes públicos. Durante la primera mitad del partido, ultras del Anderlecht lograron romper la valla de seguridad instalada en la grada visitante y arrojaron objetos, entre ellos asientos, a la grada inferior, en la que presenciaban el partido aficionados de la Real Sociedad.

      
             
      

Muchos socios txuri urdines tuvieron que abandonar esa zona de la grada para evitar ser golpeados y el árbitro detuvo durante unos minutos el encuentro, pero no llegó a suspenderlo, ante las insistentes reclamaciones de los jugadores de la Real Sociedad.