SERIE A | 1ª JORNADA

La Juventus de Motta derrota al Como de Cesc; Morata y Okafor rescatan al Milán; Pinchazo del Inter

Debut con victoria abultada de la nueva Juve de Motta ante Cesc (3-0). Morata debutó y marcó con el Milán(2-2). Pinchazo del campeón en el primer partido (2-2).

Juve Como

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Juventus 3 - 0 Como

El ítalobrasileño Thiago Motta llegó al Juventus para acabar con el ciclo de dos años negativos que ha vivido el club turinés y, este lunes, en su debut en partido oficial, dio las primera muestras del cambio ante el Como 1907 (3-0) que dirige el español Cesc Fábregas, al que dominó con holgura en la primera jornada de la Serie A.

Llegó el Como de Cesc Fábregas al Juventus Stadium como uno de los proyectos más ilusionantes de toda Italia en su vuelta a la élite después de 21 años. Los fichajes, como el de los españoles Pepe Reina y Alberto Moreno, el del galo Raphael Varane -fuera por lesión-, el del italianos Andrea Belotti o el del brasileño Gabriel Strefezza, no han sido los de un recién ascendido al uso. Es un proyecto con ganas de dar guerra, de pelear por algo más que por salvar la categoría.

Pero la realidad es que topó con un hueso muy duro de roer que hace no tanto mostraba muchas debilidades. Flaquezas que Motta, en apenas un verano en el que ha decido hacer una limpia en el equipo -no cuenta con Chiesa o Kostic, entre otros-, ha solventado. Es más, ya le ha dado el toque personal que se vio la temporada pasada, cuando entrenaba al Bolonia.

Milan 2 - 2 Torino

Con un gol en el minuto 89, el español Álvaro Morata, suplente en su debut, reanimó al Milan ante el Torino y comandó la remontada que materializó el suizo Noah Okafor en el tiempo añadido ante el Torino (2-2), que con el colombiano Duvan Zapata como líder se colocó con una ventaja de dos goles.

Impacto total el de Morata en su estreno como 'rossonero'. Compareció cumplida la hora de choque y con un marcador desfavorable, pero su actividad arriba dio alas a un Milan que luchó hasta el final para lograr un punto salvador en casa. El gol del español, de delantero puto, metiendo la punta del pie para desviar el balón hacia la portería, señaló el camino del empate.

Pero poco o nada parece haber cambiado en este Milan que, pese a haber dejado muy buenas sensaciones en pretemporada, volvió a ser muy plano, previsible y que no aprovechó el pinchazo del Inter en Génova. Ni siquiera supo aprovechar el factor casa, en un San Siro lleno, repleto de ilusión al inicio de una nueva campaña. De nuevo a remolque, de nuevo a merced del rival, obligado a remar con la marea en contra.

Volvió a la carga a la desesperada el Milan y encontró recompensa al ocaso del encuentro, justo después de que le anularan un gol en clamoroso fuera de juego al protagonista de milanista de la noche. Porque Morata, en apenas media hora, dio mucha versatilidad arriba al Milan y supo aprovechar sus minutos para reivindicar un puesto en el once.

Metió el pie en un disparo del neerlandés Tijjani Reijnders y desató la locura en San Siro, en la que reinó Okafor, siempre dispuesto a brillar en el caos, autor de nuevo de un gol decisivo como los que acostumbró la pasada campaña. Empatado el duelo en el minuto 95, no pudo el Milan cerrar la remontada completa, pero se marchó con un punto con el que no contaba. Morata se estrenó por todo lo alto.

Génova 2 - 2 Inter

Volvió a la carga a la desesperada el Milan y encontró recompensa al ocaso del encuentro, justo después de que le anularan un gol en clamoroso fuera de juego al protagonista de milanista de la noche. Porque Morata, en apenas media hora, dio mucha versatilidad arriba al Milan y supo aprovechar sus minutos para reivindicar un puesto en el once.

Metió el pie en un disparo del neerlandés Tijjani Reijnders y desató la locura en San Siro, en la que reinó Okafor, siempre dispuesto a brillar en el caos, autor de nuevo de un gol decisivo como los que acostumbró la pasada campaña. Empatado el duelo en el minuto 95, no pudo el Milan cerrar la remontada completa, pero se marchó con un punto con el que no contaba. Morata se estrenó por todo lo alto.

El duelo parecía terminado. Y el Inter saboreaba la victoria. Pero un error clamoroso de Bisseck, que había completado un buen partido, permitió al Génova empatar desde los once metros. No calculó bien el central y, en un intento de despeje con la cabeza, impactó el balón con su mano en área propia. Messías falló. Pero le cayó el rechace y definió a puerta vacía. Así, sobre la bocina, el Génova provocó el tropiezo del campeón en la primera jornada.