Tonali reconoce un problema de ludopatía; miembros de la Juve sabían que Fagioli era adicto al juego

Han pasado varios días desde que Sandro Tonali y Nicolo Zaniolo tuvieran que dejar la concentración de la selección italiana tras ser investigados por la Fiscalía de Turín en un caso de apuestas ilegales y en el país transalpino sigue la conmoción. Lo que comenzó con el Juventino Fagioli, siguió con dos de las grandes estrellas de la azurra y amenaza con convertirse en algo mucho más fuerte. Mientras, los protagonistas hasta la fecha, según la prensa italiana, asumen errores, pero niegan haber apostado en partidos de fútbol tal y como prohíbe la normativa local a los deportistas.

Este sabado, el Corriere della Sera informaba que Sandro Tonali, el mediocentro por el que el Newcastle pagó al Milán 80 millones de euros este verano, admitió ante sus allegados que había jugado y habría reconocido un problema de ludopatía por el que ya estaría recibiendo tratamiento psiquiátrico. Su objetivo curarse y poder servir de ejemplo a centenares de jóvenes que pasan por lo mismo: una irrefrenable adicción al juego.

Mientras la Fiscalía de Turín guarda silencio sobre lo ocurrido. Según el reglamento, una posible descalificación pesaría en el ámbito nacional e internacional: la sanción decidida en Italia se extendería a todas las competiciones autorizadas por la FIFA y la UEFA y, por tanto, también a la Premier League donde militan tanto Tonali como Zaniolo, que juega en el Aston Villa. "Lo tienen todo y echan a perder sus carreras", declaró Andrea Pirlo, entrenador de la Sampdoria sobre lo ocurrido.

En la Juventus, según varios medios, ya se sabía que Nicolo Fagioli tenía un problema con las apuestas. De hecho, existirían unos chats en los que se mostraría que Bonucci y algún miembro del cuerpo técnico tenía constancia. El club había asegurado en un comunicado que se enteró por la investigación de la Fiscalía de Turín. El artículo 24 del Código de Justicia Deportiva dispone que, en caso de omisión de denuncia, la sanción o inhabilitación llegaría como mínimo a los seis meses, más una multa de 15.000 euros. Fagioli, habría llegado a apostar un millón de euros, según la prensa italiana.