25 ANIVERSARIO DE LA CATEDRAL

El día que el Papa Juan Pablo II salió de Roma para consagrar la Catedral de la Almudena de Madrid

La Catedral de la Almudena fue consagrada hace 25 años por el mismísimo Papa Juan Pablo II y así fue vivir ese día

Javier González

Publicado el - Actualizado

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Un 15 de junio de 1993, en un templo de Madrid prácticamente sin terminar, gracias a un Papa llamado Juan Pablo II, se convirtió en la primera catedral de la capital. Hoy no se puede hablar de ese hombre sin poner un 'san' delante. Y eso son palabras mayores.

"A todo el mundo le gusta tener un hogar" asegura Don Jesús Junquera, la persona encargada de que esa 'casa' esté abierta y disponible para todo el mundo. Pero no siempre lo estuvo. Madrid tiene Catedral solo desde hace 25 años, mientras que todas las grandes ciudades tienen sus "grandes y hermosas catedrales."

"Entonces el Papa dijo: Yo voy a dedicar el templo"

El sueño de tener esa casa se cumplió tras una larga espera de casi cien años de obras y construcciones: "El cardenal Suquía le comentó en una visita a Juanpablo II que se estaba terminando la catedral. Y entonces el Papa dijo: Yo voy a dedicar el templo. Entonces claro, el templo no estaba terminado y hubo que acelerar las obras." 

Preparar la ceremonia -y la visita de un Papa, que no es poca cosa- no fue nada fácil. "Cuando nos dejaron ensayar en la catedral, tuvo que ser con mascarillas. Porque había tanto polvo que casi no se podía estar."

Pero no es la única anécdota que cuenta Jesús de aquel día: "Habíamos ensayado que los objetos litúrgicos iban a estar a la izquierda. Y por los motivos que fueran pues se pusieron a la derecha. Y todos los ceremonieros tuvimos que cambiar mentalmente de izquierda a derecha las entradas, las salidas..."

"Las puertas tienen que estar abiertas"

Jesús se le iluminan los ojos cuando le pregunto por el momento en el que San Juan Pablo II le saludó y le dio las "gracias por ayudar". Nuestra Catedral de la Almudena es la primera catedral consagrada en el siglo XX y la fue la primera vez que un Papa viaja desde Roma para oficiar él mismo la ceremonia. Además, la Virgen de la Almudena, por fin, volvía a tener su merecido trono.

"Las puertas tienen que estar abiertas. A veces tenemos la idea de una iglesia oscura, cerrada y un poco quieta. Yo creo que esta catedral, que es joven,  que tiene mucha luz es una catedral luminosa. Eso hace que aquí haya otro espíritu, más nuevo, más joven.. Y si se junta eso, con la novedad de haberla estrenado, hace un poco que este sea el hogar de todos. Hace que la gente se sienta tan en casa como nos sentiríamos todos en la parroquia de nuestro barrio".

Puedes ver la entrevista completa en el vídeo. Y de paso, si quieres, visitar la catedrald e forma virtual: