Los obispos de Filipinas cancelan las Misas públicas en Manila debido a la variante delta de la covid-19

El anuncio se produce después de que el Gobierno haya aumentado las restricciones en la región metropolitana, ante la expansión del virus. Se mantienen los funerales y velatorios

Los obispos de Filipinas cancelan las Misas públicas en Manila debido a la variante delta de la covid-19

Redacción Religión

Publicado el - Actualizado

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La Conferencia de Obispos Católicos de Filipinas (CBCP) ha emitido un comunicado en el que informó de la suspención de las Misas públicas en todas las diócesis de la región metropolitana de Manila, capital del país asiático. Del mismo modo, el texto indica que, ante esta situación, se dispensa a los católicos de la obligación de la Misa dominical hasta el 20 de agosto. Hasta entonces, se ha dispuesto que las Misas sean tan solo transmitidas por internet.

El pasado 30 de julio, Metro Manila -como se conoce a la región de la capital- fue puesta bajo cuarentena general, por lo que aumentan las restricciones en la zona con el objetivo de detener la expansión de la variante delta de la covid-19. Una de estas medidas es la prohibición es la de reuniones religiosas públicas, como es la celebración de la Misa.

Aunque se ha establecido la suspensión de las Misas, las diócesis afectadas han decidido mantener la celebración de funerales y velatorios, siempre que se cumpla la normativa de prevención del virus. Además, Mons. Jesse Mercado, obispo de Parañaque -una de las diócesis afectadas-, ha explicado que las iglesias podrán permanecer abiertas para que los fieles acudan a tener oración personal, igualmente cumpliendo las leyes sanitarias.

El objetivo de los obispos, la recuperación sanitaria del país

La Conferencia de Obispos ha animado a la población a seguir las indicaciones de las autoridades sanitarias del Estado y cumplir las normas de prevención para controlar el virus: "Reabriremos nuestras iglesias para el culto público el 21 de agosto, si las condiciones mejoran", explica la publicación del episcopado.

El comunicado finaliza deseando que estas medidas contribuyan a la mejora de la situación sanitaria en Filipinas. Hasta ahora, la pandemia ha elevado los contadios hasta 1.605.762 personas, arrastrando con ella a 28.093 víctimas mortales a causa de la covid-19. A día de hoy, se han administrado 20.863.544 dosis de vacunas. De las personas vacunadas, 9.369.625 cuentan con la pauta completa de dos dosis, lo que supone el 8,7% de la población total del país.

El pasado 22 de junio, el presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, amenazó con encarcelar a las personas que no acudieran a vacunarse, ya que, según explicaba el mandatario, el país se encuentra en una situación de "emergencia nacional". De hecho, el pasado 22 de marzo, la nación asiática alcanzó su pico de muertes en un solo día, llegando a situarse por encima de las 15.000 personas fallecidas.