Carta del arzobispo de Barcelona: «Hagamos vacaciones con Jesús»

El verano es un buen momento para romper con la rutina, aprovechar el tiempo libre y disfrutar de momentos intensos de oración personal o comunitaria. Para algunos son días de descanso, de cambio de ritmo, de explorar y disfrutar de todo lo que nos rodea. Solos o en compañía, es un tiempo maravilloso para hacer vacaciones y, especialmente, para hacerlas con Jesús.

Los meses de verano son ideales para aprender, divertirse y al mismo tiempo crecer en la fe. Los más pequeños de la casa también pueden hacerlo, ya sea desde el entorno familiar o gracias a las propuestas de ocio que se organizan con la llegada del buen tiempo: casales de verano, colonias, campamentos...

La mayoría de estas iniciativas se impulsan desde el Movimiento de Centros de «Esplai» Cristianos Catalanes (MCECC), la federación de centros de educación en el tiempo libre, que pertenece a la Fundación Pere Tarrés, y que cuenta con un bagaje de 65 años de experiencia. Este movimiento agrupa a más de 200 centros de «esplai» de toda Catalunya, que acogen a unos 25.000 niños y jóvenes gracias a la labor de más de 4.500 monitores.

Desgraciadamente, no todos los niños y niñas tienen la posibilidad de disfrutar de unos días de colonias o de un casal de verano. Por este motivo, cada año, la Iglesia católica a través de la Fundación Pere Tarrés promueve la campaña «Ningún niño sin colonias». Esta campaña se centra en los menores en riesgo de exclusión social. Los centros y clubes de «esplai» adheridos contribuyen ofreciendo plazas en sus actividades de verano. Uno de los objetivos principales es sensibilizar a la población de la importancia de la educación en el tiempo libre y mirar de que no se convierta en un factor de exclusión social. Paralelamente, esta Fundación de la archidiócesis de Barcelona ofrece becas para que ningún niño se quede sin colonias.

El tiempo libre es un momento adecuado para la educación y para el crecimiento integral de la persona. Con el juego y las actividades se genera una convivencia en la que interactúan comportamientos, actitudes y valores que se manifiestan en la vida de los niños. Los centros de «esplai» tienen un papel muy relevante para educarlos en la dimensión cultural y espiritual. Desde la Fundación se quiere colaborar en el bien común con la edificación de personas íntegras, socialmente responsables, capaces de amar y ser amadas y abiertas al encuentro con Dios.

Jesucristo es el modelo de persona humana, libre, atenta a los sufrimientos de sus conciudadanos, defensor de la paz y profundamente movido para presentar el verdadero rostro de Dios: un Padre que nos ama infinitamente y que nos ofrece ya desde ahora una vida eterna con Él. El Espíritu de Jesús mueve el corazón de nuestra querida Fundación Pere Tarrés y los centros de «esplai» que pertenecen al MCECC.

Queridos hermanos y hermanas, vivamos este período veraniego como un regalo. Encontremos espacios para disfrutar de nuestro entorno, para aprender y crecer espiritual y humanamente. Descubramos cómo vivir la fe con intensidad. Pequeños y mayores, hagamos vacaciones con Jesús.

† Juan José Omella Omella

Cardenal arzobispo de Barcelona