Carta del obispo de Lleida: «La Asamblea Diocesana»

El sábado 28 de mayo, nuestra diócesis celebrará la Asamblea Diocesana en la Casa de la Iglesia, situada en la calle Academia de Lleida. Es un acontecimiento muy importante para nuestra Iglesia que se repite cada año desde hace mucho tiempo y donde se hace visible la responsabilidad y la colaboración de los católicos en las distintas iniciativas de toda la comunidad diocesana, las relativas al campo de la Palabra, de la Liturgia y de la Caridad. Y es así, tanto en cada una de las parroquias, comunidades religiosas y resto de instituciones como en la curia cuya misión consiste en una permanente animación y coordinación de todos para evitar duplicidades y vacíos pastorales.

La Asamblea de este año tiene una consideración especial al estar vinculada a la iniciativa que ha propuesto el papa Francisco para la Iglesia universal con la convocatoria de un Sínodo de Obispos para el año 2023 para tratar el tema de la sinodalidad (trabajo y camino junto a otros para colaborar en todos los asuntos y decidir según la responsabilidad). Desea el Santo Padre que participen todos los católicos del mundo individualmente o encuadrados en las múltiples organizaciones en las que desarrollan su tarea pastoral. Es un asunto que a todos interesa y debe ser abordado por todos. Respecto al ciclo temporal quiero recordar que el Sínodo fue anunciado el pasado mes de mayo para un período de tres años en su desarrollo. El primer año, que ahora termina, tenía como finalidad solicitar la colaboración de todas las diócesis animando su tarea pastoral diaria y recogiendo las aportaciones sugeridas para enviarlas a la Secretaría del Sínodo por medio de los servicios de la Conferencia Episcopal Española. Los asistentes a la Asamblea Diocesana del pasado año ya tuvieron conocimiento de la convocatoria sinodal y fueron invitados a la participación.

Nuestra diócesis estaba embarcada en el desarrollo de su propio Plan Pastoral (2020-2024) con una dinámica propia y, al recibir los cuestionarios que la Secretaría del Sínodo envió a todas las diócesis el pasado mes de septiembre, se sumó al estudio y a las posibles respuestas. Para ello utilizó las primeras reuniones del curso para animar al trabajo sinodal sin olvidar el trabajo diocesano que empezó el año 2020. Comprobamos con satisfacción que era perfectamente compatible vincular las dos líneas de actuación. Ha habido reuniones de arciprestazgos, de sectores pastorales, de comunidades religiosas y de instituciones de apostolado seglar. La finalidad era responder a los cuestionarios sinodales con la mirada de la diócesis y aportando las preocupaciones, las iniciativas y los deseos de cada grupo para elaborar un documento final a remitir a la Conferencia Episcopal. Hasta finales de marzo se ha trabajado en este sentido recogiendo muchas respuestas. Hay más de quince individuales y treinta provienen de grupos. Es de agradecer el interés y la colaboración de todos los sectores pastorales.

Un equipo de agentes de pastoral ha elaborado el documento final que será presentado como ponencia en la Asamblea Diocesana. El deseo es que todos conozcan el contenido de nuestra reflexión y que sientan que su aportación se ha tenido en cuenta para mejorar nuestro propio modo de actuar en el interior de la Iglesia y mostrar más autenticidad cara al exterior de manera que se haga más creíble el Evangelio en el mundo de hoy.

Ese documento servirá al mismo tiempo para establecer los hitos más relevantes para el trabajo de nuestra diócesis durante el curso próximo.

El desarrollo de la mencionada Asamblea será el siguiente: plegaria, lectura de la ponencia elaborada por los profesores M. Antonieta Mateus y Jordi Capdevila, y diálogo entre todos. Os invito a todos.

+ Salvador Giménez Valls

Obispo de Lleida