Yolanda Díaz recuerda el trabajo de Pablo VI para "erradicar las desigualdades entre ricos y pobres"
La vicepresidenta segunda del Gobierno ha abierto con un vídeo-mensaje la mesa redonda titulada 'La nueva economía (y el futuro del trabajo)'
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La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, ha querido enviar un mensaje a los participantes del II Congreso 'Iglesia y Sociedad Democrática, el mundo que viene', que se está celebrando en la Fundación Pablo VI. La ministra de trabajo ha abierto con un vídeo-mensaje la mesa redonda titulada 'La nueva economía (y el futuro del trabajo)'.
“Me gustaría en primer lugar darles las gracias por la invitación a este congreso, necesitamos más que nunca espacios para el debate, el intercambio de ideas y para reforzar nuestra democracia, hacerla más solida, ancha y participativa. Soy, creo que lo saben, una firme defensora del dialogo, en todos los ámbitos. El dialogo social ha sido el hilo conductor de estos dos años de gestión y gobierno al frente del Ministerio de Trabajo”, ha dicho la vicepresidenta segunda del Gobierno.
Yolanda Diaz ha puesto el enfoque en esa reforma laboral “que está parando los pies a un modelo de precariedad y de temporalidad que ha hipotecado en España el presente y el futuro de tantas personas y de tantas familias”. “Los momentos de crisis económica que hemos atravesado y atravesamos han rescatado una sensibilidad y un empeño colectivo: la igualdad en todos sus vertientes a través de todos sus caminos”, ha dicho la vicepresidenta segunda del Gobierno.
Yolanda Diaz ha recordado su encuentro el pasado mes de diciembre con el Papa Francisco: “Hablé con él sobre la igualdad como eje vertebrador de todas las respuestas, igualdad en el acceso a los servicio básicos, igualdad fiscal, igualdad de los pueblos en su derecho y ansia de paz y, como no, la igualdad entre mujeres y hombres que construimos día a día con todo el empeño de que somos capaces”.
La ministra de Trabajo ha recordado además el aniversario de la Encíclica Populorum Progressum: “Corría el año 1967. El mundo afrontaba también encrucijadas decisivas y el Papa Pablo VI habló con firmeza sobre la brecha entre ricos y pobres, sobre la erradicación de las desigualdades y la perversidad de un orden económico injusto que arruinaba vidas y expectativas”.
“Pablo VI nos animó a la defensa de un trabajo inteligente y libre, humano, nos animó a la cooperación en el bien común y a la voluntad de paz”, ha explicado Yolanda Diaz. La vicepresidenta ha subrayado que en el fondo de aquel texto latía “un mandato de plena actualidad: la solidaridad universal que es un hecho para todos, es también un deber”.