El cardenal Omella pide seguir rezando por el "drama terrible" de la guerra en Ucrania: "607 días"

El presidente de la CEE ha dirigido su mirada al conflicto en Ucrania: "Rezamos para que el Espíritu Santo ilumine a los mediadores en la consecución de la paz"

El cardenal Omella pide seguir rezando por el "drama terrible" de la guerra en Ucrania: "607 días"

Redacción Religión

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607 días de guerra en Ucrania. El cardenal Omella lo ha querido recordar en el último mensaje publicado en su cuenta personal de X: “Aunque en las últimas semanas hemos dirigido la mirada al conflicto en Tierra Santa, hoy también se cumplen 607 días de guerra en Ucranía”.

Un drama terrible que lleva a unos “hermanos de fe” a la guerra: “Civiles y militares que pierden la vida”.

El arzobispo de Barcelona y presidente de la CEE ha pedido seguir “orando intensamente para que el Espíritu Santo ilumine a los mediadores en la consecución de la paz. Gracias”.

La llamada entre el Papa Francisco y Joe Biden sobre los conflictos en el mundo

El Papa Francisco mantuvo ayer una conversación telefónica con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, sobre los conflictos en el mundo y "la necesidad de encontrar caminos de paz".

La conversación, según un comunicado vaticano, "ha tenido como argumento las situaciones de conflicto en el mundo y la necesidad de encontrar caminos de paz". El Papa Francisco ha expresado frecuentemente su profunda preocupación por dos conflictos actuales, la invasión rusa de Ucrania y el desatado en la Franja de Gaza entre la milicia islamista palestina de Hamás e Israel. Este mismo domingo, tras el rezo del Ángelus dominical, Francisco lamentó la "grave situación humanitaria" en Gaza y denunció el bombardeo del hospital anglicano y una iglesia ortodoxa.

"Queridos hermanos y hermanas, una vez más mi pensamiento está en lo que ocurre en Israel y Palestina. Estoy muy preocupado y dolido, mi rezo y cercanía es para todos quienes sufren: rehenes, víctimas, heridos y sus familiares", dijo desde la ventana del Palacio Apostólico.

El pontífice denunció "la grave situación humanitaria en Gaza" y expresó su pesar por la destrucción del hospital Al Ahli de la Iglesia Anglicana y de la Iglesia ortodoxa de San Porfirio, donde murieron al menos 18 palestinos cristianos. "Renuevo mi llamamiento para que se abran espacios, se continúe haciendo llegar la ayuda humanitaria y se liberen los rehenes", instó el pontífice, ante cientos de personas que le escuchaban desde la plaza vaticana.

Y agregó: "La guerra, toda las guerras en el mundo, pienso también en la martirizada Ucrania, es siempre una derrota, una destrucción de la hermandad humana. ¡Hermanos, deténganse!".