Cáritas presenta la campaña por el empleo digno: “No vale aumentar los contratos si las horas cotizadas bajan"

Cáritas Madrid ha presentado la campaña anual por el empleo digno bajo el lema 'No todo suma, cuenta, ni vale' que tendrá lugar este 24 de abril, con el que la entidad de la Iglesia Católica pone el foco en la elevada tasa de trabajo precario y parcial que prevalece en el mercado laboral, lo que impide a quienes lo sufren hacer planes de futuro y presente.

La responsable de Empleo de Cáritas Madrid, Begoña Arias, lamenta que no se esté consolidando una tendencia estable en los empleos que se generan, por lo que esta campaña ha de servir para “tomar conciencia sobre la preocupación por el empleo como factor de dignidad de cada persona y pertenencia al sistema. La realidad del desempleo es estructural y no circunstancial. Hay que transformar esta estructura”, ha remarcado.

Por ello, en esta campaña de 2022 se incide en el factor de la dignidad y la autonomía que proporciona un puesto de trabajo estable. En este sentido, Begoña Arias ha puesto en tela de juicio los buenos datos de empleo que, en los últimos meses, arroja el INE o la EPA, y que venden como éxito desde las administraciones públicas. A su juicio, se trata de un empleo parcial y marcado por la temporalidad.

“No todo vale. Cada día constatamos en Cáritas Madrid la entrada y salida permanente del mercado que no permite a muchos salir del riesgo. Son puestos que no tienen la calidad suficiente como para transformar la vulnerabilidad social”, ha alertado.

“No vale aumento de contratos si el número de horas cotizadas baja. Los gastos de vida, vivienda, la educación de los hijos o el transporte no entiende de parcialidad. Por eso, la campaña de este año que se celebra 24 abril apela a ofrecer oportunidades laborales que permitan a estas familias vivir dignamente”, ha agregado la responsable de Empleo de la entidad sobre el incremento de contratos indefinidos que se han dado gracias a la reforma laboral aprobada recientemente.

Y es que las cifras, proporcionadas por el Informe FOESSA y presentadas por Cáritas en los últimos meses, hablan por sí solos. La inestabilidad laboral grave se ha duplicado y alcanza ya en la Comunidad de Madrid a un total de 169.000 familias, mientras que el paro de larga duración ha pasado del 30% en 2018 al 39% en 2021.

Los jóvenes es uno de los colectivos más afectados por esta inestabilidad laboral, ya que la tasa de exclusión roza el 21% entre los jóvenes menores de 29 años, mientras que el porcentaje de desempleados en menores de 25 es del 33%. Por su parte el número de personas de entre 18 y 30 años que ni estudian ni trabajan es mayor que aquellos que gozan de una actividad reconocida, bien de estudios o laboral.