¿Cómo repartió la Iglesia los fondos obtenidos a lo largo del año 2018?

De la cantidad obtenida en la declaración de la renta, la Iglesia recibió en 2018 un total de 256,54 millones de euros- ¿Dónde destinó estos fondos?

¿Cómo repartió la Iglesia los fondos obtenidos a lo largo del año 2018?

Redacción Religión

Publicado el - Actualizado

4 min lectura

Este lunes el vicesecretario de Asuntos Económicos de la Conferencia Episcopal Española, Fernando Giménez Barriocanal, ha presentado los datos definitivos de la parte económica de la Memoria de Actividades de la Iglesia 2018 que tienen su origen en la Declaración de la Renta de 2019, y que refleja la actividad económica desarrollada en 2018.

La Iglesia ha presentado esta parte económica de su actividad en un ejercicio de transparencia y responsabilidad, en cumplimiento de lo previsto en los Acuerdos. Pero sobre todo por responsabilidad y gratitud a todos los que con su colaboración permiten que la Iglesia siga cumpliendo su labor.

La Iglesia rinde cuentas en dos sentidos: qué recursos recibe y dispone para cumplir su labor y cómo emplea dichos recursos en sus fines propios: evangelizar, vivir la fe y darse a los demás.

El sostenimiento de las diócesis, la parte más importante

De la cantidad obtenida en la declaración de la renta, la Iglesia recibió en 2018 un total de 256,54 millones de euros y empleó a lo largo de ese año, conforme a lo presupuestado, 252,78 millones de euros. De esa cantidad, la parte más importante, sirvió para el sostenimiento de las diócesis:

202,09 millones se entregaron a las diócesis para los gastos generales de estructura, los sacerdotes, la atención pastoral, los seminarios y la capacidad potencial de obtención de recursos. 18,39 millones se emplearon en pagar la Seguridad Social del Clero. Todos los clérigos diocesanos con dependencia del presupuesto diocesano, sacerdotes y religiosos con encomienda diocesana, cotizan por el salario mínimo interprofesional. Por ultimo, 2,32 millones de € se destinó al sueldo de los obispos.

La Conferencia Episcopal Española dispuso de 29,98 millones de € que fueron distribuidos del siguiente modo: en primer lugar una aportación extraordinaria a Cáritas diocesana de 6,24 millones de €. Desde el año 2009, y con motivo de la crisis económica, la Conferencia Episcopal Española decidió incluir una partida extraordinaria en el sistema de reparto (Fondo Común Interdiocesano), minorando el importe a distribuir a las diócesis, para atender necesidades asistenciales de emergencia

Para los Centros de formación (Fac. Eclesiásticas, Upsa, etc.) 5,21 millones de € y para las campañas de comunicación y transparencia, 5,13 millones de €.

Las ayudas a proyectos de rehabilitación y construcción de templos fueron de 3,95 millones. Se trata de una ayuda compensatoria a las entidades de la Iglesia por la pérdida de la exención de IVA, a partir del año 2007, en la construcción de templos.

Para las actividades pastorales nacionales la CEE aportó 3,54 millones de € y para el mismo funcionamiento de la Conferencia Episcopal Española se utilizaron 2,62 millones de €. Se trata de la partida destinada a colaborar con la financiación de la estructura y funcionamiento de la Conferencia Episcopal Española.

Las actividades pastorales en el extranjero tuvieron 1,28 millones de € y la Conferencia de Religiosos (CONFER) 1,07 millones de €. Para las instituciones de la Santa Sede como el Óbolo de San Pedro y el Mantenimiento del Tribunal de la Rota se utilizaron 0,50 millones de €

Al fondo para Monasterios les llegó 0,22 millones de € y por último el ordinariato Iglesias orientales recibió 0,17 millones de €

El remanente de ese ejercicio, 3,76 millones de €, se empleó en fondos propios en TRECE. La Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal entiende que se trata de un proyecto plenamente coincidente con los fines propios de la Iglesia de apostolado, además de permitir participar de la eucaristía diaria a miles de personas impedidas, enfermas o de avanzada de edad en hospitales, residencias de ancianos o sus propios domicilios.

¿Cómo repartió la Iglesia los fondos obtenidos a lo largo del año 2018?

La economía diocesana

El dinero de la Asignación Tributaria que se envía para el sostenimiento de las diócesis no tiene una finalidad específica, se integra en el presupuesto global de cada diócesis. Cada diócesis lo incorpora a sus fondos propios y lo distribuye según sus necesidades con los criterios que cada diócesis dispone, pues su organización es diferente y autónoma. Por esta razón la CEE solicita a las diócesis el envío de las cuentas consolidadas, que incluyen la administración diocesana, las parroquias y otras instituciones con dependencia directa. Se trabaja siempre en criterios de consolidación y homologación contable

Las diócesis contaron, en 2018, con 974,31 millones de € de ingresos que tuvieron los siguientes orígenes: las aportaciones directas de los fieles: fueron de 326,01 millones de €. Desde la asignación tributaria llegaron 224,88 millones de € y desde los ingresos de patrimonio y otras actividades económicas, 106,17 millones de €.

Por último otros ingresos corrientes fueron de 264,19 millones de € y los ingresos extraordinarios de 53,03 millones de €

De los recursos disponibles, las diócesis emplearon 954 millones de euros del siguiente modo: para las acciones pastorales y asistenciales se utilizaron 220,78 millones de €. Para la retribución del Clero 182,68 millones de € y del personal seglar 165,46 millones de €

Las diócesis aportaron a los centros de formación 24,31 millones de € y para la conservación de edificios y gastos de funcionamiento 271,78 millones de €. Por último para los gastos extraordinarios se utilizaron 88,98 millones de €