Este Domingo se celebra la Jornada de Vocaciones Nativas: "Es la única manera de mantener esta Iglesia"

Obras Misionales Pontificias pide la colaboración y la oración por los jóvenes que han sentido la llamada para ser sacerdotes o religiosos en los territorios de misión

José María Calderón y Jesús Torres

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Como todos los años, este domingo, 30 de abril, Obras Misionales Pontificias celebra la Jornada de Vocaciones Nativas coincidiendo con la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones. En ella, se pide a los fieles la colaboración económica y y la oración por los jóvenes que viven o han nacido en los más de 1.100 territorios de misión que hay en el mundo y que han sentido la llamada para ser sacerdotes o para vivir la vida consagrada.

"La Jornada de Vocaciones Nativas da una visión universal a la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones, pero no solo en mi diócesis, sino en todos los lugares del mundo", ha explicado el director de OMP España, José María Calderón. "La Iglesia necesita que surjan vocaciones en los lugares a los que va para que puedan dirigir, gobernar y pastorear en su propio territorio".

Ambas jornadas comparten un mismo cartel y un mismo lema: "Ponte en camino, no esperes más", en línea con el lema de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), que se celebrará en agosto en Lisboa: “María se levantó y partió sin demora” (Lc 1, 39). Los materiales conjuntos de las Jornadas se encuentran en la web www.paraquiensoy.es.

Jesús Torres, misionero en Mozambique

El programa 'Mediodía COPE' ha contado este miércoles con el testimonio de Jesús Torres, un misionero del IEME que estuvo 27 años en Mozambique, 13 de ellos como rector del seminario de Beira. El sacerdote segoviano ha explicado lo importante que es que se fomenten estas vocaciones dentro de los propios territorios de misión, porque "es la única manera de mantener esta Iglesia", ha explicado. “Los misioneros tenemos que saber retirarnos y que tome el relevo la Iglesia local porque, de momento, nos cuesta confiar en que ellos van a tomar las riendas”.

Obra de San Pedro Apóstol

En la presentación de esta jornada, se ha explicado el funcionamiento de la Obra de San Pedro Apóstol, con la que la Santa Sede apoya económicamente a todos los seminarios diocesanos del mundo y a 900 noviciados. Con las aportaciones de todos los países se crea un Fondo Universal de Solidaridad, que en 2022 reunió 15.354.754,09 €. Este dinero se distribuye equitativamente, para poder ofrecer una formación de calidad a los futuros sacerdotes y religiosos en las misiones. La pandemia ha afectado fuertemente a las aportaciones de muchos países, y por ello se han tenido que reducir las ayudas. Se ha dado prioridad a los proyectos básicos sin los que los seminarios tendrían que cerrar, y no se pudieron atender las peticiones de 978 noviciados. En esta situación, la colaboración con las vocaciones nativas es más necesaria que nunca.

El Santo Padre se hace cargo de estas vocaciones que nacen en las misiones, a través de una de las Obras Misionales Pontificias: la Obra de San Pedro Apóstol. Nacida en 1889, fue asumida hace 100 años por la Santa Sede como el cauce para sostener todos los seminarios diocesanos que hay en las misiones, y para apoyar los noviciados locales.

España, líder en generosidad

Nuestro país ocupa el primer puesto en el ránking de solidaridad con la Obra de San Pedro Apóstol. En 2022, OMP España envió 1.977.000 euros para apoyar 92 proyectos en 20 países, recuperando así los niveles prepandemia. Los beneficiarios fueron 9.645 seminaristas y 577 formadores. La pandemia también afectó a la recaudación de la Obra en España.