Medio millón de fieles esperaban en Toledo a Juan Pablo II en 1982: "Yo la noche anterior no dormí nada"

Juan Díaz, actual delegado diocesano de Medios en Toledo, era en aquel entonces seminarista y en la noche anterior tuvo que preparar algo muy especial para todo el Seminario

Santiago Tedeschi Prades

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El 4 de noviembre de 1982, Juan Pablo II comenzó la jornada con una visita a Guadalupe, donde se postró ante la imagen de la Virgen Morenita de Villuercas. A media mañana llegó en helicóptero al barrio de Santa María de Benquerencia, de Toledo, acompañado del cardenal don Marcelo González Martín. En la gran explanada del centro cívico del barrio le recibieron medio millón de personas. Allí presidió la Santa Misa, en la que pronunció una homilía dirigida al apostolado seglar.

A su llegada al helipuerto que se había construido para la ocasión, fue recibido por el alcalde Juan Ignacio de Mesa, que le entregó las llaves de la ciudad. Después de cogerlas y bendecirlas con una mirada llena de gratitud, según cuenta la crónica de aquellos días, añadió: “Qué maravilla estar en una ciudad como Toledo, tan importante como ha sido para la historia de la Iglesia Española”.

Juan Pablo II en España

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El delegado diocesano de medios de comunicación social de Toledo, Juan Diaz-Bernado Navarro, era un seminarista del último curso que se estaba preparando para ordenarse sacerdote al año siguiente. ECCLESIA ha hablado con él para recordar ese día: “Los seminaristas nos encargamos de la Celebración Litúrgica en lo que se refiere al acolitado, al lectorado y a participar en la celebración con la suerte de estar en el centro cívico donde fue la Eucaristía, esperándoles y le pudimos saludar. Habló con nosotros y nos dirigió unas palabras”.

A Juan en particular le tocó “quitar y poner el micrófono cada vez que hablaba”. Otros compañeros “eran diáconos que él luego ordenó en Valencia y los demás tenían funciones del acolitado y del lectorado en la Santa Misa”.

Juan Pablo II en España

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Don Marcelo dirigió al principio unas palabras a Juan Pablo II: “Toledo os recibe con lo mejor de su alma y de su corazón”. Y es que medio millón de fieles estaban esperando a Juan Pablo II desde primera hora de la mañana: “La explanada del polígono era inmensa y en los vídeos que hay de la época se puede ver que estaba completamente abarrotada de fieles. De ese medio millón de fieles, había también 5 mil catequistas rurales […] también hay que recordar que fue festivo en Toledo y vinieron de todos los pueblos de la diócesis”.

Juan tiene una anécdota muy curiosa del día anterior a la visita de Juan Pablo II: “Yo la noche anterior no dormí nada. El rector del seminario se dio cuenta de que no se había preparado un libro de firmas para el Santo Padre y me pidió a mí que me encargase de elaborar una primera página, con una letra gótica, con un texto que él me dio, para que el Papa pudiera inaugurar el libro de firmas del seminario. Pasé toda la noche dibujando una orla, rotulando el texto con la letra que me había dicho, para que el Papa, al día siguiente, pudiera poner su firma en la primera página”.

Juan Pablo II en España

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Además, al terminar a las 7 de la mañana, Juan tuvo que ir corriendo hacia el polígono para la Misa y al llegar “me dijeron que tenía que leer la Segunda Lectura y, si ni siquiera haberla leído antes, hice también eso”.

Después de la Misa, el Papa compartió el almuerzo con 14 personas. A los postres le presentaron los regalos con ocasión de su onomástica: dos tartas de mazapán. Como gesto de gratitud – cuenta la crónica – “Juan Pablo II no quiso renunciar a probar el mazapán toledano. Por primera vez había probado este producto nuestro que le pareció exquisito”.

Para el delegado diocesano de medios de comunicación social de Toledo, el Papa “ya conocía muy bien España, había estudiado profundamente a San Juan de la Cruz y conocía la cultura. No hay más que escuchar los discurso y homilías que pronunció y quedan no solamente para el momento que estaba viviendo España hace 40 años, sino que tenían una previsión de futuro impresionante. El mensaje que dirigió aquí en Toledo al apostolado seglar es un mensaje que tiene una plena actualidad en el momento presente”.