Mons. Luis Argüello pide que se respete el "marco común" para el diálogo en la política española

El secretario general de la CEE ha remarcado las palabras del cardenal Blázquez en el inicio de la Asamblea Plenaria, pidiendo respeto a la Constitución

Redacción Religión

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Después del discurso del cardenal y de entonarse la Salve en toda la sala de la calle Añastro, los obispos españoles se han levantado de sus asientos para dar comienzo a la reunión de la Asamblea Plenaria este 18 de noviembre. En la puerta esperaban los periodistas mientras los prelados salían poco a poco. El secretario general, mons. Luis Argüello, se ha detenido para atenderles y responder a las preguntas sobre el discurso del presidente de la Conferencia Episcopal Española.

"En las últimas horas hemos vivido un debate sobre el artículo 27 de la Constitución", ha comenzado respondiendo el obispo auxiliar de Valladolid. "En este debate se ha producido una especie de giro, al pensar que el artículo 27 corresponde al titulo I de la Constitución, pero no al capitulo I y II que tienen una especial protección".

El secretario general ha explicado que en los comentarios vertidos en las últimas horas, parece "como si fuera del capítulo II" en el que los artículos "tienen otro tipo de protección". "Nos importa mucho resaltar en un momento convulso, ver la importancia que tiene, no solo el texto constitucional, sino el espíritu de sentarse, de buscar acuerdos y de tener un diálogo que nos ayude a todos los españoles", ha explicado mons. Luis Argüello.

Para tener un diálogo hace falta tener un marco común de referencia

Un diálogo y un 'sentarse' que son necesarios para todos los problemas que vivimos en España: "Las situación territorial, las reivindicaciones que se producen en Cataluña, la situación en las calles, el deseo de tratar de buscar una salida desde las claves del diálogo y del encuentro, el texto de don Ricardo ha puesto muchos acentos en la ciudadanía y en la freternidad. Pero para tener un diálogo hace falta tener un marco común de referencia, que sea aceptado por los que dialogan".

"Parece importantísimo, si queremos sentarnos a la mesa, que se respete un marco de referencia. Poner el acento en un respeto a la Constitución" que es también "un respeto a la libertad".