El obispo de Córdoba subraya que el cuidado de la Casa Común "debe ser una preocupación de todos"

Demetrio Fernández, obispo de Córdoba, ha dedicado su última carta semanal de este mes de agosto a la Jornada de Oración sobre el Cuidado de la Creación. Una nueva oportunidad y don del Papa Francisco para despertar en todos los cristianos el amor por la conservación de la Casa Común.

“Que la justicia y la paz fluyan” - Jornada Mundial de oración por el cuidado de la Creación, así titula el obispo esta carta semanal, que se hace eco del lema propuesto por la Iglesia para esta jornada de celebración y sensibilización.

Una jornada ecuménica

La carta recuerda la creación de esta jornada como consecuencia de la presentación de la encíclica del Santo Padre, la “Laudato sí”, el 25 de mayo del año 2015, y también a petición del metropolita Ioannis de Pérgamo: “Recomiendo la celebración de esta Jornada Mundial para el cuidado de la creación, como ya venía haciéndose entre los ortodoxos”.

Esta carta también subraya el tiempo que la Iglesia intensifica la oración y la sensibilización por el cuidado de la Madre Tierra: “La Jornada está fijada para el 1 de septiembre de cada año y se prolonga este sentido del cuidado de la Creación durante todo el mes de septiembre y que se concluye el 4 de octubre, fiesta de san Francisco de Asís, patrono de los que cuidan de la Creación”. Además, se agradece que esta iniciativa sea celebrada hoy por otras confesiones cristianas.

"Compromiso y corresponsabilidad de todos"

El mensaje de la carta insiste en que la preocupación por el cuidado de la Creación es una tarea de todo ser humano y también para aquellas personas que se han olvidado de que el universo es obra de Dios.

La carta considera esta jornada como una gran oportunidad que viene “a transmitir a todos, especialmente a los niños y jóvenes en edad escolar, que el mundo, los astros, las aguas, los árboles, el medioambiente no es fruto en su origen de la casualidad. Si no que tiene como autor a Dios”.

Por otra parte se destaca que “todos somos corresponsables en el cuidado de la casa común, asumiendo cada uno el compromiso de que la justicia y la paz fluyan, como fluye el agua de los manantiales”. El obispo Fernández, en sintonía con el mensaje de los obispos españoles para esta ocasión, subraya la gestión del agua como un bien común que genera vida. De igual modo, pide a los poderes públicos "que integren la mirada de lo comunitario, del valor intrínseco del agua y de sus múltiples ramificaciones en lo social, para el diseño de planes hidrológicos, agrícolas y de gestión que sean sostenibles y responsables con todas las dimensiones de este preciado recurso”.

Una nueva pastoral social

La carta subraya además que el descuido del planeta es consecuencia del pecado del egoísmo, mientras que su cuidado es parte de la justicia social. El obispo, en este sentido, invita a todos a la oración por la conservación de la tierra y a su uso responsable para el beneficio de todos: “Orar para que todos los habitantes del planeta, creyentes y no creyentes, colaboremos en este cuidado de la casa común, que a todos nos afecta”.

Por último, monseñor Fernández Gómez exige que la preocupación por el Cuidado de la Creación sea incorporado en el anuncio del mensaje cristiano: “En la catequesis y predicación de la Iglesia”. Además, se recuerda que el interés que estos temas obtuvieron en Lisboa durante la pasada JMJ y se despide muy ansioso esperando la segunda parte de la 'Laudato Sí¡, anunciada por el Santo Padre para el próximo 4 de octubre.