El peligro de las supuestas "sectas cristianas": "Me sentía como un esclavo, viví un auténtico infierno"

El experto en sectas, Luis Santamaría, y el extestigo de Jehová, Mikel Najera, han ofrecido sus experiencias en TRECE

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Cada año, la llegada del verano trae el repunte del crecimiento de las sectas en nuestro país. El periodo estival es el tiempo ideal para que estos grupos proliferen y aumenten su número de adeptos y captaciones. Un fenómeno que se da especialmente en territorios del Mediterráneo como la Comunidad Valenciana o la Costa del Sol, pero que también se replica en Madrid, Barcelona y Canarias, como puntos calientes para las sectas. El experto y fundador de la Red Iberoamericana de Estudios de las Sectas, Luis Santamaría del Río, da cuenta en 'Ecclesia' de TRECE de los peligros y fenómenos que protagonizan estos grupos en nuestro país, disfrazándose cristiano.

"Cuando hay tiempo libre, de relajarnos y bajar las defensas, puede ser propicio que las sectas se acerquen a nosotros prometiéndonos cosas maravillosas y la salvación de nuestras vidas", explica Luis sobre el modus operandi de estos grupos. De hecho, acaba de publicar 'A las afueras de la cruz', analizando el fenómeno de las sectas de origen o apariencia cristiana, que en España supera el centenar de organizaciones. "He localizado 99, pero ya tengo nuevos datos de otros grupos. Hace años las identificaba como el 12 % del total, si extrapolamos los datos, ¿cuántas sectas serán en total?", cuestiona el autor, que también señala que un 1 % de la población española pertenecería a sectas.

También explica cómo aunque las sectas cristianas no son las más numerosas, sí son las que más fieles reúnen. "Los tres grupos mayoritarios superan los 200.000 seguidores". Algunas de ellas se disfrazan de realidades de la Iglesia católica, pero ¿cómo distinguirlos? "Toman elementos católicos o anglicanos, incluso se presentan como aceptados por las grandes confesiones cristianas. Con ese mimetismo, intentan atraer a personas defraudadas con la fe católica, o que se han sentido rechazadas". Sin embargo, señala Luis, les diferencia la preocupación por lo externo, derivas doctrinales apartadas del cristianismo y posturas exclusivistas de la relación con Dios.

De las consecuencias de estas sectas, da cuenta Mikel Najera Lorenzo, exmiembro de los Testigos de Jehová, que nos explica cómo vivió en primera persona los métodos de estos grupos. Él formó parte de la organización desde los 4 años, cuando su madre fue captada. "Tienes que estudiar sus publicaciones, ir a las reuniones, a predicar, hacer tareas... Yo era un niño, pero tenía vida de adulto. Era un esclavo del grupo". La comunidad controlaba todos los aspectos de su vida, sus amistades, sus estudios... "Te dicen que estudies formación profesional y no estudios superiores, que es peligroso porque puedes pensar y cuestionarte cosas".

Mikel estuvo 25 años dentro de los Testigos de Jehová, pero fue expulsado después de divorciarse y rehacer su vida. "Te hacen un comité judicial interno, ante el grupo de ancianos, con preguntas íntimas y humillantes. Ahí empiezas a ver la parte no amable del grupo y reconocer dónde estás". El experto Luis Santamaría explica que en los grupos pequeños, los líderes tienen más fácil ejercer la autoridad sobre los adeptos. "Este grupo tiene 120.000 miembros en España, parece estar normalizado porque está inscrito como confesión de forma legal, pero encontramos que ejerce un control férreo sobre las vidas de sus adeptos", como técnicas de control social y segregación.

Tras su salida, llegó a necesitar cinco años de terapia psicológica, porque la realidad de los Testigos de Jehová era la única que había conocido en su vida. "Tuve que reconstruir mi cabeza desde cero. Mi hermano se cruza conmigo por la calle y ni siquiera me mira a la cara. Nuestra relación es nula". Por casos como éste, el libro de Luis pretende ser una ayuda para los agentes de pastoral de la Iglesia y para todos los cristianos, para discernir y distinguir correctamente en estas cuestiones.