Una mano misteriosa: el milagro que permitió a Tobías sobrevivir en los Andes a 15 grados bajo cero

El productor de cine Miguel Ángel Tobías ha estado en el plató de TRECE para presentar su libro 'Renacer en los Andes', donde cuenta los milagros que le permitieron salvar su vida

Redacción Religión

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Es milagroso que Miguel Ángel Tobías siga entre nosotros. Así mismo lo ha reconocido en diversas ocasiones el productor y director de cine que en la década de los noventa fue un rostro conocido en los televisores de nuestro país como colaborador de programas de Antena3 o Telecinco.

Hace unos años, el productor vasco sobrevivió gracias a un milagro, como él mismo relata en su libro 'Renacer en los Andes'. Su particular historia de supervivencia se desarrolla durante una expedición en esta cordillera que recorre buena parte de América del Sur.

En un momento de la expedición, Miguel Ángel Tobías se perdió del grupo sin comida y a varios grados bajo cero. Su experiencia guarda cierto paralelismo con la de los supervivientes del accidente aéreo que sufrió en 1972 la Fuerza Aérea Uruguaya, y de la que salieron con vida 16 de los 45 pasajeros. De hecho, el prólogo del libro de Tobías es de Nando Parrado, uno de los supervivientes de aquella tragedia andina.

Miguel Ángel Tobías vivió aquella experiencia cercana a la muerte, de la que extrajo numerosas lecciones de vida que a lo largo de los años ha querido compartir, como ha explicado en el programa 'ECCLESIA' de TRECE.

“Es importante compartirla con otras personas para que, sin la necesidad de vivir situaciones límite, seamos más conscientes de la necesidad de encontrar un sentido a la vida, entender que la vida es una aventura, un gran milagro y la forma de honrarla es vivirla con la mayor intensidad posible, y es lo que quise transmitir con este libro”, explica el productor de cine haciendo alusión a su libro 'Renacer en los Andes'.

"Estaba congelado, me senté en unas piedras a esperar lo que ocurriese”

El milagro comenzó durante el viaje de Tobías a Perú, en un viaje-aventura acompañado de amigos que arrancó con el Camino Inca y un descenso peligroso en canoa que les trasladaría hasta la ciudad peruana de Arequipa, donde se disponían a descansar un par de días. No obstante, surgió la posibilidad de escalar la montaña de Chachani, que se elevaba a más de tres mil metros.

Aquella expedición era de alto riesgo, ya que no tenían las provisiones necesarias ni el tiempo para acometer esta aventura con éxito: “Fue una locura. Casi me cuesta la vida a mi y a mis compañeros de expedición”, reconoce Tobías en 'ECCLESIA'.

“Abandoné el campo base a las siete de la tarde con quince grados bajo cero con taquicardia, y quería descender para bajar el ritmo cardíaco y que el corazón no se parase. Yo sabía que no se podía descender una montaña de ese tipo de noche sin saber donde iba, entonces bajé con riesgo de despeñarme. Estuve hasta las diez de la noche caminando y, congelado sin poder moverme, me senté en unas piedras a esperar lo que ocurriese”, ha relatado el productor vasco.

Contra pronóstico, Miguel Ángel Tobías sobrevivió a la noche. Un verdadero milagro. En cualquier caso, la lógica invitaba a pensar que el aventurero español se encontraba en sus últimas horas de vida ante la imposibilidad de ser rescatado.

Tobías entabla un diálogo con Dios y se despide de su familia

Fue en aquellas horas críticas, hasta que volvió a caer la noche, cuando Tobías entabló un diálogo intenso con Dios: “Era consciente de que moriría aquí y le pedí a Dios ayuda. Le pedí una serie de cosas que se fueron sucecediendo una detrás de otra y acabé salvando la vida. Por eso digo que viví un milagro. No fue suerte, sino una intervención de Dios”, opina.

En este diálogo con el Señor, el director de cine fue repasando mentalmente lo que había sido su existencia en la tierra: “Fue duro porque en ese repaso no están solo la cosas buenas, sino también las malas y en mi corazón pedía perdón a quienes había hecho daño, me despedí mentalmente de mi familia y les decía que estuvieran tranquilos”, ha contado.

Además de hacer frente al frío extremo, Tobías tenía que luchar para no quedarse dormido en medio de la montaña, que es la invitación que hace tu cuerpo en esta situación tan dura para acabar con el sufrimiento. Si duermes, te mueres. Miguel Ángel Tobías lo hizo hasta en dos ocasiones, pero en ambas una mano tocando su cuello y mejillas misteriosa le despertó: “Yo lo sentí y eso me despertó, y al despertarme empezó de nuevo ese proceso de sufrimiento y dolor, pero seguí peleando por la vida. La segunda vez que la mano me toca estaba tan cerca de la muerte, que ya ni sentía dolor”, ha continuado relatando.

Cuando todo apuntaba a su final, a Tobías se le apareció la imagen de su madre. Tobías logró balbucear la palabra 'mamá': “Aquella imagen me dio fuerzas para despertarme aunque significara sufrir porque no podía rendirme. Tenía a mi madre ahí”, ha explicado.

"La vida debe servirnos para vencer los miedos"

Su salvación milagrosa le permite estar hoy entre nosotros, aunque Miguel Ángel Tobías ha visto de cerca la muerte en varias ocasiones, al rodar en zonas de guerra y terremotos. De ahí que el productor haya aprendido a saborear cada instante de su vida.

“La vida es una bendición y la manera de honrarla es viviendo la vida con intensidad, siguiendo el camino del corazón y sobre todo que deberíamos ser capaces de saltar al otro lado del miedo. Tengo una charla en internet con el título 'La vida está al otro lado del miedo' y así deberíamos vivir, siendo conscientes de que la muerte camina a nuestro lado, que la vida es vulnerable y nos debería servir para precisamente vencer esos miedos que nos impiden a muchos humanos hacer cosas que soñamos o vivir como queremos”, asevera.

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