El proyecto “Tocan a mi puerta” creado por una parroquia valenciana atiende a más de 700 personas

El proyecto denominado 'Tocan a mi puerta', impulsado por la delegación de Migraciones del Arzobispado de Valencia y la Cáritas parroquial de San Miguel de Soternes de Mislata, ante las necesidades económicas como consecuencia de la pandemia, ha atendido durante 2020 a más de 700 personas en situación de exclusión social.

Según se puede leer en la página web de la Archidiócesis de Valencia, en total han recibido ayudas 730 personas y 242 familias, en su mayoría inmigrantes aunque durante las últimas semanas se han duplicado las peticiones de familias españolas, según ha indicado Olbier Hernández, delegado de Migraciones y párroco del templo.

Igualmente, en estos ocho meses de funcionamiento del proyecto, 103 niños y 34 bebés han sido también atendidos. “En verano la situación se había tranquilizado un poco pero a partir del mes de noviembre las necesidades volvieron a aumentar”, ha añadido Olbier Hernández.

La gran labor de los voluntarios de Cáritas

Además, durante el día de Nochebuena y Navidad, esta iniciativa ha beneficiado a 74 familias y, además, se entregaron 50 menús especiales “para celebrar estas fechas”.

El proyecto 'Tocan a mi puerta' cuenta con la colaboración de 16 voluntarios y de numerosas entidades, asociaciones, empresas y personas anónimas “que han hecho posible esta gran obra de amor”, según el párroco que destaca la “gran labor de los voluntarios de Cáritas que colaboran en la identificación y entrevistas a las personas que necesitan ayuda, que las derivan a los economatos que están abiertos o a Cáritas Diocesana, así como el trabajo de los delegados de Cáritas por zonas”.

Asimismo, entre el voluntariado de la parroquia figuran muchos miembros de familias que en estos momentos están siendo acogidas por la delegación de Migraciones del Arzobispado.