El arzobispo de Toledo no descarta trasladar a la tarde del jueves la procesión del Corpus en caso de lluvia
Ante la alta probabilidad de lluvias que se prevé para la mañana del jueves, Francisco Cerro cree que hay que hacer todo lo posible para que la Custodia de Arfe procesione
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El arzobispo de Toledo, Francisco Cerro Chaves, se ha mostrado partidario de hacer "todo lo posible" para que la procesión del Corpus Christi prevista para este jueves, 8 de junio, salga a la calle a pesar de la previsión de lluvia, abriendo la puerta incluso a poder retrasarla a la tarde, en el caso de que la previsión diga que habrá lluvia torrencial en la jornada matutina.
Preguntado por esta cuestión durante la rueda en la que se ha presentado la Memoria Económica del año 2022, Cerro ha dicho que ahora se están viendo todas las posibilidades, ya que "sería dramático que la procesión no se realizara".
Cerro Chaves, que ha bromeado con el hecho de que se suspendiera por primera vez la procesión bajo su mandato al frente del arzobispado, ha indicado que en todo caso, si en algún momento la lluvia hace acto de presencia, y siempre y cuando no sea torrencial, se podría proteger a la Custodia de Arfe con algún elemento de cubrimiento.
"Somos partidarios de que la procesión se haga. Si resulta que hay una lluvia en forma de tromba de agua durante las tres o cuatro horas que dura la procesión, pensaríamos. Pero podríamos incluso plantear la posibilidad de hacerla por la tarde", ha indicado, abundando en todo caso en que la procesión "debe salir".
Así, el titular de la diócesis toledana insiste en que se va a procurar "por todos los medios" que la procesión tenga lugar. "Esa es mi postura y también la del Cabildo. Estamos preocupados porque las informaciones hablan de un porcentaje alto de lluvia", ha afirmado.
La decisión se tomará pensando también "en las miles de personas que vienen expresamente" a Toledo, ya que "es la procesión más importante del año". "Para Toledo es su vida. Seremos maximalistas hasta donde podamos".
Toledo se prepara para su semana grande
Los operarios del Ayuntamiento de Toledo han tenido que arreglar los desperfectos que el agua ha ocasionado a los tradicionales toldos que cubren el trayecto de la procesión del Corpus, teniendo que trabajar a destajo incluso algún fin de semana de mayo.
Pese a las inclemencias meteorológicas, la ciudad ya luce sus mejores galas con sus estandartes colgados, elementos decorativos y a falta de colocar las jardineras de flores y el tomillo en aquellas calles donde la Custodia de Arfe procesionará este jueves (lluvias mediante).
A lo largo de esta semana se han organizado en Toledo medio centenar de actividades musicales y un buen número de torneos deportivos, que acompañarán a las celebraciones religiosas.