La emocionada despedida de los obispos españoles a Bernardito Auza y el obsequio de la Conferencia Episcopal que le ha entregado Argüello
La Asamblea Plenaria ha comenzado con un emotivo aplauso a Bernardito Auza, que dejará España en mayo tras más de cinco años como Nuncio para ejercer esta misma responsabilidad en la Unión Europea

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La apertura de la Asamblea Plenaria que los obispos celebran esta semana ha comenzado con un emotivo aplauso de despedida a Bernardito Auza que dejará España el próximo mes de mayo tras cinco años como Nuncio de España para ejercer la misma responsabilidad ante la Unión Europea.
En su intervención, ha asegurado que a lo largo de este lustro ha cumplido su tarea de promover las relaciones entre la Iglesia y el Estado y en la que se han producido unos 50 nombramientos de obispos.
"Durante mi tiempo de cinco años y poco más de mandato aquí, hemos tenido casi 50 nuevos obispos, nuevos nombramientos y muchos nuevos obispos, entonces seguramente la parte, podemos decir, la responsabilidad más importante que el Santo Padre me ha confiado", ha explicado, en declaraciones a los medios.
Además, ha destacado los "desafíos" que ha vivido durante estos años junto a la sociedad española, empezando por la pandemia de la Covid-19 teniendo que "condensar" muchos de sus "trabajos y responsabilidades en prácticamente poco tiempo".
“He compartido alegrías y penas de la sociedad y de la Iglesia española. Como cada uno de ustedes en sus diócesis, a pesar de los desafíos, tengo por seguro que la esperanza es la mejor semilla”.

El nuncio ha precisado que durante estos años, se ha "esforzado" en acudir donde se le han llamado. "De madrugada y de noche me hallaba en aeropuertos o estaciones de tren, o en coche. Conozco las diócesis y muchas de sus instituciones gracias a la invitación y la hospitalidad ofrecidas por parte de cada uno de ustedes", ha remarcado.
Además, ha indicado que, durante sus viajes ha podido disfrutar de la habitación y del despacho llamados "del nuncio" en sus residencias episcopales y ha tenido "el placer de saludar y conversar con las autoridades autonómicas y locales", ocasiones que, según ha señalado, le han procurado "muchas amistades".
Igualmente, ha destacado que ha comprendido "la alta estima y puesta en valor que el Sumo Pontífice tiene por la devoción popular, cultivada por tantas hermandades y cofradías tan vivas por la geografía española" y que le recuerdan "cuánto es de andaluza la Iglesia en Filipinas, especialmente durante la Semana Santa".
También ha subrayado la labor de "órganos diocesanos, movimientos laicales y asociaciones eclesiales" y ha dado "aliento a los fieles laicos a participar activamente en la vida pública de la nación, como actuación de ciudadanos responsables y de testimonio de la propia vida cristiana".
Auza destaca los lazos que unen España de su Filipinas natal
Sobre su conexión con España, Auza ha dado gracias a los misioneros españoles que fueron sus profesores de Universidad y ha recordado que la evangelización de su pueblo fue "llevada a cabo con el sudor y el sacrificio de muchísimos misioneros de esta tierra". "De aquí partieron los misioneros que llevaron el Evangelio a Filipinas ya en el siglo XVI", ha comentado.
Auza ha asegurado que "jamás" había "pensado, ni en sueños, la oportunidad de que un día sería enviado como Nuncio Apostólico en España". Por ello, considera que para él, "en cierta manera, ser Nuncio aquí ha sido como un aportar en correspondencia".

En cuanto a la nueva tarea que le ha encomendado el Papa Francisco como nuncio ante la Unión Europea, Auza ha destacado que no le será "completamente nueva" gracias a los 23 años de estudios y de misión en varios países en Europa y los siete años y medio de labor en el campo multilateral en Nueva York y Washington. En todo caso, ha afirmado que "la Unión Europea, tan nueva como entidad, pero tan antigua en sus componentes, será un nuevo desafío, aún con muchas incógnitas y problemáticas propias".
El mensaje de agradecimiento de Luis Argüello a Bernardito Auza
Por su parte, el presidente de la Conferencia Episcopal Española, Luis Argüello, ha mostrado al nuncio el "agradecimiento" de los obispos españoles por estos cinco años y medio de trabajo en los que, según ha indicado, han "compartido alegrías y penas de la sociedad y de la Iglesia españolas".
"Filipinas ha estado más cerca de nosotros. Cuente con nuestra amistad y que su tarea ante las instituciones de la Unión Europea contribuya, en este momento convulso de Europa, a ofrecer la luz del Evangelio y de la Doctrina Social de la Iglesia, así como una perspectiva católica de la situación del mundo, para ayudar a edificar la justicia y la paz entre los pueblos", ha deseado.
Tras la intervención de Auza, el presidente del episcopado le ha entregado en nombre de todos los obispos los cuatro volúmenes de la Liturgia de las Horas en castellano, personalizado con su nombre.