El servicio de la Iglesia en las cárceles de Aragón premiado por Instituciones Penitenciarias
La Pastoral Penitenciaria de Aragón ha recibido un prestigioso premio por su trayectoria y su trabajo durante estos años
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Con motivo de la fiesta de Nuestra Señora de la Merced, 24 de septiembre, patrona de las cárceles, de las personas presas y de la Pastoral Penitenciaria, Instituciones Penitenciarias ha concedido a la Pastoral Penitenciaria de Aragón la "Medalla de plata al mérito social" por toda la trayectoria de esta Pastoral.
Este jueves, 24 de septiembre, la Pastoral Penitenciaria de Aragón ha organizado un coloquio con los capellanes Álvaro Sicán y Federico Castillo, de Zuera y Daroca, respectivamente, quienes conversarán con el periodista Juanjo Hernández. La cita se retransmitirá este miércoles, a las 19.30, desde el Centro Joaquín Roncal de Zaragoza, y podrá seguirse en directo a través de la página web http://pastoralpenitenciaria.iglesiaenaragon.com
Además del acto de entrega de la medalla, que tendrá lugar el jueves a mediodía en el Centro Penitenciario de Daroca, esta cárcel acogerá una misa el sábado, a las 10.00 horas, presidida por el sacerdote Federico Castillo y en la que participará un grupo de internos, con las medidas de prevención estipuladas.
El equipo ‘Salida Digna’ de la Pastoral Penitenciaria
La Pastoral Penitenciaria de las diócesis aragonesas cuenta con 24 programas de formación, más de 100 voluntarios y un equipo específico — conocido como ‘Salida Digna’— que acoge a las personas con menos recursos cuando quedan en libertad para facilitar su reinserción en la sociedad.
Monseñor Pérez Pueyo, obispo de Barbastro-Monzón, ha explicado en declaraciones a la página web de la Iglesia en Aragón, cómo la Iglesia intenta “propiciar en los reclusos el reconocimiento de su culpa; predisponerlos a pedir perdón a las víctimas; restituir los posibles daños ocasionados; y ayudarles a recobrar la dignidad que tienen como hijos de Dios”. “Sólo quien realmente «ha tocado fondo» en su vida o ha experimentado en carne propia el «infierno», como dijo el papa Francisco, puede convertirse en profeta del «cielo»”, ha subrayado el prelado aragonés.
El testimonio de la delegada de Pastoral Penitenciaria en Zaragoza
Isabel Escartín, delegada de Pastoral Penitenciaria en Zaragoza, ha compartido en la web de la Pastoral “el estímulo que este reconocimiento supone para quienes intentamos llevar esperanza, fe y calor a los internos”, y ha agradecido las direcciones de los centros de Daroca, Zuera y Teruel. Un galardón, dice la delegada, que es para el tejido de voluntarios, “esos hombres y mujeres que dan su tiempo, su ciencia, su dinero, su coche, todo para que las personas privadas de libertad reciban la paz, el amor y la esperanza de Dios”.
Escartín apunta que las personas privadas de libertad forman parte de las “periferias físicas y existenciales” de las que habla el papa Francisco”, a quien cita para recordar que “el castigo no debería comprometer nunca la posibilidad de volver a empezar”. Pese a las limitaciones de la pandemia, la Iglesia sigue atendiendo todas las llamadas de auxilio que recibe, también en el ámbito de las prisiones.