Valencia celebrará este 2022 un Año Jubilar Mariano por el centenario de la Coronación de la Virgen de los Desamparados
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La archidiócesis de Valencia celebrará, a lo largo del presente año 2022, aniversarios y acontecimientos especiales entre los que destaca el Año Jubilar Mariano, con motivo del centenario de la Coronación Canónica de la Virgen de los Desamparados, concedido por la Santa Sede por petición del cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares.
A esta celebración se suman otras efemérides como la conmemoración de los 750 años de la Cartuja Santa María de Portacoeli, en el término municipal de la localidad valenciana de Serra, y los 600 años de la llegada a Valencia del relicario del caballero Jaume Castellà, con la santa Espina y otras reliquias en su interior. Del mismo modo, en 2022 continuará la celebración del Año Jubilar de San Francisco de Borja (Gandia, 1510-Roma, 1572) que concluirá en la fiesta del santo duque en el mes de octubre.
Año Mariano por el centenario de la Coronación
La diócesis de Valencia celebrará este Año Jubilar Mariano con una "gran misión diocesana" mariana desde el segundo domingo de mayo de 2022 hasta mayo de 2023, con motivo del centenario de la Coronación Canónica de la Virgen de los Desamparados.
Esta gran celebración mariana incluirá la salida de la imagen peregrina de la Mare de Déu a grandes ciudades de la diócesis de Valencia y a santuarios marianos, durante todo ese año, en el que se invita también a peregrinar a la Basílica de la Virgen de los Desamparados. Con motivo de la gran misión diocesana, no se realizarán salidas particulares de la imagen peregrina de la Virgen de los Desamparados, ya que se reservarán estas salidas para la visita a los lugares designados en la gran misión.
Asimismo, a lo largo de este Año Jubilar, serán organizados distintos actos celebrativos, litúrgicos y culturales, a través de una Comisión Diocesana de Trabajos, junto a la Archicofradía de la Virgen y diversas entidades. Así, está previsto realizar Catequesis preparatorias, encuentros con jóvenes, y un gran "Besamanos extraordinario", así como seguir fomentando las obras de caridad asociadas a la devoción a la Virgen.
Este Año Jubilar conmemora el centenario de la Coronación Canónica de la imagen de la patrona de Valencia, una iniciativa del entonces arzobispo de Valencia, cardenal Enrique Reig y Casanova, autorizada el 15 de octubre de 1921 por el papa Benedicto XV. Fue el 12 de mayo de 1923 cuando tuvo lugar la ceremonia de Coronación Canónica de la Virgen de los Desamparados en el Puente del Real ante una multitud de valencianos.
Virgen de los Desamparados en la Basílica (Foto: A. Sáiz)
750 años de la Cartuja de Portacoeli
Fue fundada el 5 de septiembre de 1272 por el dominico fray Andrés de Albalat, que fue obispo de Valencia, y la primera piedra fue colocada en 1274. Es la primera cartuja construida en el Reino de Valencia y la tercera de la Corona de Aragón.
Los principios del monasterio fueron muy modestos, apenas una ermita y un patio cerrado con celdas para alojar a los primeros religiosos procedentes de la Cartuja de Escala Dei, en Tarragona. En la actualidad sigue manteniendo la vida consagrada.
Cartuja de Portacoeli (Foto: A. Sáiz)
Monasterio de Llutxent
Enclavado en el Monte Santo, denominado así por el Milagro de los Corporales que tuvo lugar, según la tradición, en 1239 durante la Reconquista, fue construido en 1422 cuando Olf de Próxita da a la comunidad de religiosos dominicos los terrenos para ponerlo en pie y la dotación para su mantenimiento al lugar donde ocurrió el Milagro.
Actualmente también es punto de referencia paisajístico y natural por la gran pinada que lo rodea y por el algarrobo centenario que tiene delante. El convento fue propiedad de los dominicos y con la desamortización de Mendizábal pasó a manos privadas y actualmente es propiedad de la Diputación de Valencia.
Monasterio de Llutxent (Foto: M. Guallart)
La Espina de Jaume Castellà cumple 600 años en la Catedral
En la Catedral de Notre Dame de París se conserva desde el siglo XIII el armazón o anillo de fibras vegetales que los soldados trenzaron y en el que metían tallos de una especie de acacia con grandes espinas que causan mayor dolor por el veneno que llevan.
Fue el rey de Francia san Luis, en el año 1239, quien consiguió la corona de espinas que, desde Jerusalén y Constantinopla, había llegado a manos de unos banqueros de Venecia.
En la Catedral de Valencia se venera la llamada Espina de Jaume Castellà, procedente de aquélla venerada en París, y que está encerrada en una ampolla de vidrio con un cerco de oro con perlas y piedras preciosas.
Recibe su nombre del caballero Jaume Castellà que la entregó a la Catedral de Valencia en 1422, junto con un bloque metálico que custodia una gran variedad de reliquias y otro vaso de cristal con un pequeño Lignum Crucis; todo ello forma el actual conjunto, sobre un pie de plata más moderno.
Espina de Jaume Castellà en el Museo de la Catedral (Foto: V. Gutiérrez)
San Francisco de Borja
En el mes de octubre de 2021 dio comienzo el Año Jubilar de San Francisco de Borja concedido por el papa Francisco con motivo del 350 aniversario de la canonización del santo y el 450 aniversario de su muerte, que se cumplirán este 2022, celebración que tiene como finalidad "intensificar el conocimiento y la devoción a este santo valenciano ejemplar"cuya santidad es luz y actualidad para los tiempos de hoy", según palabras del Arzobispo de Valencia.
En este año se suceden diversas actividades en los diferentes templos jubilares, cuyo epicentro es Gandia, localidad natal del santo. Son templos jubilares las iglesias regidas por la Compañía de Jesús en la Archidiócesis, las parroquias cuyo titular es San Francisco de Borja, las parroquias Santa Cruz de Llombai y Natividad de Turís, y la Insigne Colegiata de Gandia.
Inauguración Año Jubilar San Francisco de Borja en la Colegiata de Gandia (Foto: V. Gutiérrez)
Otros aniversarios
También en 2022 se cumplirán 50 años de la repristinización de la Catedral de Valencia, proceso que comenzó en 1972 para llevar a cabo la retirada de casi todos los elementos clásicos con el fin de recuperar el aspecto gótico original. Esta tarea fue obra del arquitecto valenciano Juan Pedro Segura de Lago (1911 ? 1972).
Precisamente, el baldaquino de Valencia, que estuvo en la Catedral de Valencia durante poco más de 30 años (entre 1941 y 1974), fue construido tras la Guerra Civil española y está hecho de mármol. Hoy puede verse ubicado en el altar de otra iglesia, Nuestra Señora de la Asunción de la localidad de Llíria. Además, este año se conmemoran los 150 años de la declaración como Basílica de la Real capilla de la Virgen de los Desamparados; el 175 aniversario de las IX Horas en Valencia; 50 años del fallecimiento de monseñor Marcelino Olaechea, que fue arzobispo de Valencia de 1946 a 1966.